“Ellos (bandas) tienen un conflicto. Durán se constituyó como el bastión de Los Ñetas y los Latin King, en Guayaquil. Entonces, este (Durán) era su territorio, pero los Latin King, ante la llegada de Los Choneros y la desarticulación de varias estructuras Latin King, que se transformaron a Los Choneros, los sobrantes, por decirlo, llegaron a Durán. Es decir, hay una invasión de los Latin King a Durán, donde estaban Los Ñetas que se transformaron en Chone Killer y ya se encontraron las dos organizaciones”, comentó el jefe policial.Esa ‘invasión’ territorial más la diversificación de actividades de economía criminal, como el secuestro, tráfico de armas y la infiltración de los Chone Killer en administraciones municipales anteriores, que benefició a esta banda para lavar dinero y hacerse de contratos públicos, mantienen viva esta disputa entre ambos grupos delictivos.La Policía ha señalado a los Chone Killer como los que estarían detrás del atentado contra el alcalde Luis Chonillo en mayo del año anterior. Pero en el cabildo también habría infiltración de los Latin King, según el coronel Santamaría, y eso explicaría el asesinato de varios funcionarios de la actual administración.“Vamos viendo que no hay a quién más poner, o soy de aquí o soy de acá. Es el nivel de penetración de la estructura delictiva y el Estado ha cometido varios errores, uno de ellos fue legalizar a una banda delictiva. Acordémonos que personería jurídica le dieron a los Latin King, tuvieron participación política, teníamos asambleístas Latin King, o sea, ellos estaban permeando todo el Estado. Eso es lo que conlleva al caos de violencia que se está generando”, expresó el jefe policial del distrito Durán con relación al proceso que se efectuó en 2007 durante el gobierno de Rafael Correa.En una reciente investigación de InSight Crime, una plataforma especializada que se dedica al estudio de la principal amenaza a la seguridad nacional y ciudadana en Latinoamérica y el Caribe, se señala que los vínculos de estas dos principales bandas que operan en Durán con las redes criminales transnacionales parecen ser esporádicos y oportunistas más que sistémicos y duraderos.“Quizá sea más alarmante su penetración en el Gobierno municipal, donde al menos uno de estos grupos se aseguró contratos de obras públicas, así como el control de instituciones gubernamentales clave que presiden todo, desde cuestiones de tenencia de la tierra hasta multas de tráfico”, se indica.A partir de entrevistas con líderes comunitarios, moradores, funcionarios gubernamentales e informes de inteligencia, InSight Crime elaboró un mapa de la distribución de las bandas en la ciudad ferroviaria.En al menos nueve sectores prevalecen los Chone Killer. Los Latin King se encuentran en cinco zonas y la banda de alias Llorón opera en el cerro Las Cabras.Esta última agrupación, según el coronel Roberto Santamaría, es una facción de Los Águilas, brazo armado de Los Choneros, que mantiene aparentes alianzas con Chone Killer y Latin King.El jefe policial tiene como objetivo, entre otras cosas, cambiar el modelo de gestión operativa: pasar de la prevención a la reacción con el apoyo de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) en el marco del conflicto armado interno y estado de excepción vigente en Durán.Él es partidario de golpear simultáneamente a las dos estructuras delictivas inclusive, yendo en busca de los delincuentes en sus propias casas. (I)","isAccessibleForFree":false,"hasPart":{"@type":"WebPageElement","isAccessibleForFree":"False","cssSelector":".paywall"}}
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El 8 de octubre en la ciudadela El Recreo se produjo el asesinato de cuatro jóvenes. Luego de eso hubo otras dos masacres de cuatro y siete personas. Foto: API
La violencia en Durán va más allá de una disputa por territorio para delinquir, desatada entre las dos principales bandas: Chone Killer (antes Los Ñetas) y Latin King, que operan en este cantón de Guayas. La rivalidad se ha convertido ya en una lucha histórica, incluso ideológica, en la que la economía criminal pasa a un segundo plano.