Hace 20 días Pedro Mosquera Zúñiga había renunciado a su trabajo como operador de carga en uno de los puertos del sur de Guayaquil, según su esposa, porque había recibido amenazas de narcotraficantes, quienes lo habían contactado para que permitiera el ingreso de drogas a los contenedores.

Mosquera, de 32 años, fue baleado en la intercepción de las avenidas Ernesto Albán y 25 de Julio este jueves 24 cuando viajaba en su camioneta junto a su esposa, pero lo que alertó a la Policía es que los mismos atacantes habrían entregado a la víctima dinero en una gasolinera cercana minutos antes del crimen.

La esposa de la víctima dijo que Mosquera fue a recogerla a ella a la gasolinera, pero en los videos se ve que la mujer llegó a la estación de servicio con su esposo y que se encontraron con los mismos hombres que dos minutos después le disparan en al menos 24 ocasiones.

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Foto: El Universo

“Hay un intercambio de paquetes entre la víctima y uno de los hombres que iba en el auto del que dispararon”, menciona el general Fausto Buenaño, comandante de Policía de la zona 8, quien sostiene que en la camioneta se halló un bolso con 20.000 dólares.

El general detalla que en la cartera de la esposa de la víctima había otros 6.000 dólares y que esperan que la viuda colabore con las autoridades para descubrir en qué estaba metido su esposo y dar con los criminales.

Los agentes mencionaron además que la mujer, que resultó ilesa en el ataque, habría intentado llevarse de la escena el celular de su esposo pero este equipo fue incautado y lo llevaron bajo cadena de custodia a la Policía Judicial para que se haga el peritaje.

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Foto: El Universo

El comandante mencionó que tras este crimen estarían dos bandas de narcotraficantes que se disputan el control del sur de la ciudad y del ingreso de droga al puerto. Se presume que Mosquera fue contactado por estas organizaciones durante el tiempo que laboró como operador de carga.

La Unidad de Muertes Violentas investiga este crimen y busca a los asesinos que huyeron en un auto gris en dirección al Guasmo.

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Según la Dirección de Inteligencia, en los últimos años doce funcionarios del puerto han sido asesinados por bandas dedicadas al narcotráfico.

Otros trabajadores que han quedado heridos o resultaron ilesos de milagro decidieron abandonar su trabajo por miedo.

El 15 de mayo un trabajador del área de carga fue atacado por sujetos armados en el barrio Cuba, en el sur de Guayaquil.

Los sicarios dispararon en varias ocasiones a la víctima que iba en su carro y este logró conducir hasta que la Policía capturó a los atacantes.

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En el carro quedaron dos orificios de bala de los ocho disparos que realizaron los criminales. La víctima en este caso resultó ilesa y se capturó a los dos hombres que le dispararon.

El 4 de diciembre de 2020 Kenny Castro, otro guardia del puerto, fue asesinado en la ciudadela Coviem cuando salía de su jornada laboral y se dirigía a su casa. Los asesinos iban en una moto que fue abandonada cuadras adelante por un desperfecto mecánico.

Unos días antes, el 26 de noviembre, Ernesto Lenín Saavedra Plúas salía de su turno de trabajo en el puerto y se dirigía por la avenida 25 de Julio cuando desde una camioneta negra doble cabina le dispararon.

Inicialmente, Saavedra cayó herido en la calzada de la vía y fue trasladado al hospital Teodoro Maldonado Carbo del Seguro Social (IESS), pero falleció por la gravedad de las heridas.

Uno de los proyectiles entró por el maxilar derecho y salió por el oído izquierdo de la víctima. Registró otras lesiones en una pierna y un brazo. (I)