Buena Fe, LOS RÍOS

El secuestro y asesinato de Víctor Hugo Ramón Medina, comerciante del cantón Buena Fe y Quevedo, ha causado conmoción en la población rioense.

Víctor Hugo Ramón fue secuestrado la mañana del viernes, aún se desconocen las circunstancias del rapto.

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Tras su desaparición, sus familiares empezaron a postear fotos del comerciante pidiendo su liberación. Desde entonces no se supo más del empresario hasta la noche del sábado cuando se viralizaron videos donde se lo observaba sin vida en el recinto Chapingo, sector Los Guayacanes de Buena Fe.

La Policía aún no se ha pronunciado sobre el suceso. A través de un audio de WhatsApp, Francisco Ramón, hermano del fallecido, dijo que había sido secuestrado, y pese a que pagaron a los delincuentes el dinero solicitado, lo mataron.

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El cuerpo de Víctor Hugo Ramón estaba cerca de una vivienda sobre un camino de piedra, extraoficialmente se indica que, al parecer, él trató de huir de sus captores y estos le dispararon hasta ocasionar la muerte.

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Su cuerpo fue llevado a la morgue de Quevedo y luego a la sala de velación del Sindicato de Choferes, donde se realizó el velorio.

Víctor Hugo Ramón era propietario de un restaurante y un negocio de transacciones de pagos virtuales en la avenida 7 de Agosto del cantón Buena Fe.

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El asesinato de Víctor Hugo Ramón ha generado reacciones de los ciudadanos de Quevedo, Buena Fe y cantones aledaños donde era conocido.

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Tras lo ocurrido, Marco Franco, dirigente de la Cámara de Comercio de Quevedo, pidió al presidente Daniel Noboa que se declare el toque de queda en Quevedo. Dijo que si no son atendidos tendrán que paralizar Quevedo. “Todos los negocios deberán suspender sus actividades hasta que el Gobierno venga a nuestra ciudad y actúe urgente”, indicó Franco.

En tanto que la alcaldesa de Buena Fe, Diana Anchundia, a través de su red social indicó que “hay un pueblo dolido, una familia que pierde un caballero a carta cabal”.

La muerte de Víctor Hugo Ramón se suscita siete días después del asesinato de Rubén Rivera, otro comerciante de Buena Fe, que también fue secuestrado y posteriormente asesinado.

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El pasado 29 de diciembre Rubén Rivera fue secuestrado en Buena Fe, los delincuentes pedían una fuerte cantidad de dinero por su liberación.

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Ante lo ocurrido, sus familiares pedían videos a los delincuentes para conocer el estado de salud del comerciante, sin embargo, los antisociales solo le enviaron una fotografía y al día siguiente, el 30 de diciembre, les informaron que estaba muerto.

Los captores pidieron a los familiares de la víctima la entrega de mil dólares para poder devolverles el cuerpo del comerciante, caso contrario lo iban a “picar”.

Angustiados, los allegados de Rivera hicieron el pago del dinero para luego ir en busca de su cuerpo, que fue dejado abandonado en una guardarraya del recinto Cuatro Mangas de Buena Fe.

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Freddy Litardo también comerciante y empresario de Quevedo fue secuestrado la noche del 27 de diciembre, después de permanecer cinco días bajo el control de sus captores, pudo ser liberado en el sector La Baldramina de la parroquia San Cristóbal de Quevedo.

El delito de secuestro es el que más se registra en Quevedo y cantones aledaños, causando zozobra en la población.

Ante el temor de ser víctimas de la delincuencia, muchos comerciantes han preferido cerrar sus negocios o abandonar su lugar de residencia para emigrar a otras provincias o fuera del país en busca de seguridad. (I)