“¡Mi hijo, hijo de mi corazón!”, gritaba Blanca Jimbo mientras observaba el cuerpo sin vida de su hijo Byron Israel Paredes Jimbo, mientras era trasladado por los agentes policiales hacia la ambulancia de Medicina Legal.
El joven, de 25 años, fue una de las dos víctimas del doble crimen ocurrido en Arenillas, cantón fronterizo de la provincia de El Oro, junto con Jorge Luis Flores Calva, de 45 años.
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Blanca relató que su hijo salió temprano de casa para ir a cumplir con su jornada laboral en una bananera de la zona, trabajo al que no llegó. Luego recibió una llamada ante la novedad, y al dirigirse a la escena, reconoció su cuerpo.
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Detalló que Byron y su compañero, Jorge Luis, se trasladaban en una motocicleta, pero según la Policía Nacional, desconocen el paradero del vehículo, por lo que una de las hipótesis es un posible robo, sin descartar otras líneas investigativas.
El hallazgo de los cuerpos fue reportado la mañana de este jueves, 13 de marzo, junto al paso alterno de la vía Arenillas-Huaquillas.
Fue un grupo de trabajadores agrícolas, quienes, al avanzar en su camino hacia el campo, hicieron un hallazgo. Entre la maleza vieron lo que parecía un par de botas amarillas, lo que los llevó a descubrir la escena: dos hombres tendidos sin vida, con heridas de bala en la cabeza y el torso.
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Inmediatamente, los testigos alertaron a las autoridades. Miembros de la Policía Nacional y la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) acudieron al lugar para proceder con el levantamiento de los cuerpos y recolectar evidencia.
En el lugar también se encontraron vainas percutidas. El capitán Carlos Carapaz, jefe de la unidad policial de Arenillas, informó que las autoridades están revisando cámaras de seguridad cercanas y tomando declaraciones. Se investiga si las víctimas tenían antecedentes o habían sido objeto de amenazas. (I)
