Estudios científicos indican que el juego de ajedrez ayuda al desarrollo de las habilidades cognitivas, memoria, destrezas verbales y numéricas..., a la concentración, la creatividad, la capacidad de decidir, de resolución de problemas; es un buen ejercicio cerebral que se combina con terapias para personas con Alzheimer, en cuanto a la estimulación cognitiva. / EFE Foto: Sergio Ángeles


La concepción de que el juego del ajedrez tiene un carácter eminentemente intelectual, esto es, de habilidad o destreza mental ya que es una actividad en la que su desarrollo está asociado a una estrategia abstracta y puede actuar como estimulador de la mente a través de la mejora de habilidades cognitivas en el ser humano, potenciando algunas competencias básicas para el aprendizaje, estudio.

Los descubrimientos de la investigación científica pueden ayudar a todos los involucrados en la educación: docentes, rectores, directores de establecimientos educativos, incluyendo a los alumnos, padres y gestores de políticas; a comprender mejor el proceso de aprendizaje y a estructurar ambientes que lo nutran.

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Así mismo, mostramos preocupación por el limitado conocimiento exhibido por nuestros docentes y directivos de instituciones escolares, de la utilidad del estudio de las ciencias cognitivas y su aplicación en las distintas áreas del ecosistema educativo. Tenemos un porcentaje muy alto de educadores que fueron formados bajo el enfoque de corrientes el conductismo, lo que les da, de alguna manera, formas tradicionales de ver la educación. Complementario a este hecho, están los maestros que no se dedicaron a actualizar conocimientos y a innovar su práctica, como por ejemplo, comprender cómo aprende el cerebro, cómo funcionan los sistemas de memoria, las funciones ejecutivas, las emociones, la atención, etc., permitirá al educador repensar su forma de enseñar, implementando nuevas estrategias que activen el potencial del cerebro de sus alumnos para aprender, pero antes que nada, permiten al educador recrear su propia misión de vida y valorarse como eje fundamental en el desarrollo de un ser humano. Este conocimiento nos lo está proveyendo la neuroeducación. (O)

Johnny Granda Morán, ajedrecista, Guayaquil