El 13 de abril de cada año festejamos el Día del Maestro ecuatoriano, como homenaje al escritor y educador Juan Montalvo, quien nació el 13 de abril de 1832. Esta fecha es propicia para destacar la labor que cumple el docente en beneficio del país.

Feliz Día del Maestro

En estos momentos difíciles que vive el Ecuador, el docente es el pilar fundamental dentro del sistema educativo, se ha acoplado a nuevas formas de enseñar y aprender, y este cambio se lo debe de tomar como positivo, ya que la educación no puede detenerse. Así también, mediante el teletrabajo realiza capacitaciones en línea, planificaciones curriculares y otras actividades a su cargo a través de las diferentes plataformas virtuales. Reconocemos la entrega de los maestros fiscales, fiscomisionales, municipales y particulares que día a día dan lo mejor de sí en beneficio de sus estudiantes.

Los maestros son personas que saben de responsabilidad, de entrega, de profesionalismo, pero, sobre todo, de amor y respeto por el ser humano, así es como el maestro se convierte en un ser entrañable e inolvidable, aquel que merece admiración por jugar un papel fundamental en la vida de nuestros estudiantes.

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13 de abril: Día del Maestro Ecuatoriano

Es preciso reconocer que el maestro ecuatoriano ha vivido una constante renovación, siendo un guía en el acontecer nacional, poniéndose a tono con las nuevas corrientes pedagógicas para cumplir con eficiencia su tarea.

La fecha es un reconocimiento a la labor de los docentes en todo el país, un homenaje a su aporte en la formación de las futuras generaciones. Sin los maestros, las escuelas serían espacios vacíos y carentes de conocimientos, y sin ellos, la educación simplemente no tendría vida. El Día del Maestro se instauró en Ecuador un 13 de abril de 1920, durante el mandato de José Luis Tamayo, quien fue presidente del país hasta 1924.

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Ser maestro es una vocación sublime, de convertirse en algunos casos en padre o madre que un niño o un joven necesita, es el jefe máximo de un pelotón de mentes ávidas de amor, paciencia, comprensión, cariño y enseñanza. Podemos llamar maestros a aquellas personas que dejan sus vidas en las aulas de escuelas y colegios, que no se limitan a un horario de clases, y en época de pandemia evolucionaron, aprendieron el manejo de las tecnologías para estar vigilantes de sus pupilos de aula. (O)

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Alfredo Suquilanda Valdivieso, doctor en Jurisprudencia, Quito