El Día del Padre

El padre es un hombre que goza de la felicidad, sensibilidad, ternura y bondad. Es quien a pesar de su apariencia rígida está lleno de amor y comprensión, porque su corazón es sensible y le dicta lo que tiene que hacer con sus hijos.

Del padre nace la sabiduría

El verdadero padre es aquel que llega a ser el amigo más leal y que su compañía se convierte en el mejor estímulo para sus vidas, por lo tanto, formemos a nuestros hijos con el resplandor de los buenos ejemplos para que florezcan seguros en la vida, sembremos en sus mentes los grandes ideales que son las pautas que uno recuerda siempre a través del tiempo.

Hagamos de nuestros hogares la hoguera que arde sin apagarse jamás porque está presente la llama del amor, del respeto mutuo y la felicidad, pilares sobre los cuales crece la felicidad, que todos añoramos.

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El padre es un hombre que siendo aún joven frunce el ceño y siente las preocupaciones de un viejo cuando no puede satisfacer lo que necesitan sus hijos; y que siendo anciano se rejuvenece y se siente un gladiador cuando ve colmados y realizados sus anhelos.

A los padres debemos amarlos con la misma vehemencia con la que amamos a las madres. Ellos son seres que se han creado para luchar el uno junto al otro, estos dos unieron sus vidas para la gran felicidad de sus hijos.

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Reciban todos los padres un saludo en su día, lleno de mucha calidez y amor; que este sea el inicio para departir juntos haciendo votos por la unidad y el progreso de la sociedad entera. (O)

Esneyder Castro Salvatierra, docente, Jipijapa