Crecí escuchando que la juventud es una de las etapas en las que más disfrutamos, donde más nos encontramos con experiencias inolvidables en nuestras vidas. Sin embargo, la realidad es que los jóvenes se enfrentan a una serie llamada “vida”, con capítulos de decepción, felicidad, orgullo, manipulación y presión social, solamente queremos ser perfectos ante los ojos de nuestras familias. Entre las cosas con las que tienen que lidiar los jóvenes están:
La ‘presión de grupos’ es el término que describe la influencia que nuestros compañeros ejercen sobre nosotros para que adoptemos ciertos comportamientos, valores o actitudes. Esta presión puede ser positiva, motivándolos a esforzarnos más en estudios y actividades extracurriculares, pero también puede ser negativa, llevándonos a comportamientos perjudiciales como las influencias o actitudes destructivas.
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El ‘burnout académico’ describe el agotamiento emocional y físico causado por la presión de cumplir con altas expectativas académicas, incluyendo noches sin dormir y ansiedad por exámenes y tareas. La búsqueda de la perfección, que antes parecía real, resulta ser una ilusión. Además, el bullying y el ciberacoso, impulsados por la presión de encajar, pueden provocar graves problemas emocionales como depresión y ansiedad. Germán fue una víctima del ciberacoso, sufrió en silencio. Él hubiese cumplido 15 años. Es triste escuchar que tu compañero dejó este mundo a la corta edad de 12 años y que sus padres no tenían idea de lo que él pasaba día, tarde y noche.
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‘Salud Mental’, la importancia de cuidarnos
He aprendido que la juventud tiene altibajos y que los errores son parte del ser humano. Entendí que nada ni nadie es eterno y que el sufrimiento, aunque para algunos, requiere comprensión y atención. Estimados padres y entidades educativas presten atención, los jóvenes sufren al querer encajar y eso puede traer consigo tragedias. (O)
Cameron Hurtado, Guayaquil
