Escuché una declaración de Sofía Espín, referente a la erosión regresiva del río Coca, en la que sostuvo que esa regresión afecta al río Coca, pero que no a la central hidroeléctrica Coco Codo Sinclair.

Ministro Luque buscará rescatar contrato para mitigar erosión regresiva que afectaría a Coca Codo Sinclair

Me parece que la señora Espín, como asambleísta, cree que sabe de todo, cuando en realidad, no empieza ni siquiera con el razonamiento elemental del problema. Se ha demostrado hasta la saciedad que la erosión regresiva del río Coca va a llegar hasta las obras de captación de la central hidroeléctrica más grande del país, ¿cómo se puede sostener la idea de que eso no afecta a la central?

Ministro de Energía espera adjudicar en dos semanas contrato para proteger la captación de Coca Codo

Es lamentable que el bloque más grande de la Asamblea Nacional carezca de capacidad de razonamiento: hace poco otra la asambleísta fue a la central en cuestión a alardear que estaba trabajando al 100 %, dejando de lado la gran cantidad de fisuras que se presentaron por la mala calidad de la obra, construida en un Gobierno que privilegió la forma y no el fondo.

Publicidad

CIDH admitió una petición de exlegisladora Sofía Espín para que se revise su destitución en el 2019

Hay voces que aseguran que se alertó del tema de la erosión regresiva aún antes de que se construya esa central, pero que fueron irresponsablemente desoídas. Parece que es una constante de quienes caen en fanatismos el tratar de resaltar aún cosas mal hechas, con tal de enaltecer a sus gobiernos, pero la realidad no funciona así. Cuando se hacen las cosas, simplemente por relumbrón, apariencia y apresuradamente, las cosas no salen bien. En este caso lo grave y vergonzoso es que por tratar de salvar la imagen de un gobierno, se sostengan, irresponsablemente, hechos que carecen de racionalidad. (O)

José Manuel Jalil Haas, ingeniero químico, Quito