Todas las semanas y más aún en los feriados, los choferes de buses de cooperativas, en su mayoría interprovinciales, de Guayaquil y otros cantones del país, toman como parqueadero un terreno esquinero vacío junto a la casa vacacional del IESS (Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social) y junto a una antena de una empresa de telefonía móvil, en la avenida Roldós Aguilera del cantón General Villamil (Playas).
Los bordillos y las tapas del alcantarillado que construyó el Municipio están rotos por dichos buses al subir la vereda y entrar al terreno. Las familias de dicho sector tenemos que soportar escándalos de los pasajeros y choferes de los vehículos que llegan a partir de las 05:00, algunos ebrios; hacen bulla, prenden radios con volumen alto, dejan encendidos los motores de los buses, generan basura... Después, desde las 15:00, los choferes empiezan a pitar con las bocinas de sus buses para que los pasajeros, turistas, se apuren, se cambien de ropa y aborden los transportes.
La calle en mención es angosta, de una sola vía de bajada al malecón, y estos buses interrumpen la circulación porque se estacionan mal. No hay ningún miembro de la ANT (Agencia Nacional de Tránsito) que pueda solucionar dicho problema.
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La Alcaldía de Playas debería ordenar el cerramiento del solar vacío y obligar a cumplir las ordenanzas de predios. ¿Quién se responsabiliza por el basurero que genera, los daños a las aceras, los bordillos y las tapas del alcantarillado, que son perjuicios para la institución municipal? Moradores, y personas que tenemos casas para ir a descansar a Playas los fines de semana, hemos denunciado dichas anomalías; nadie ha sido capaz de tomar medidas correctivas. Pedimos a la Administración electa solucionar el inconveniente y a la ANT que no le tiemble la mano al sancionar irregularidades de tránsito. (O)
Segundo Gerardo Vargas, ingeniero comercial, Playas
