Indudablemente el Ecuador del 2024 pareciese un nuevo país, pero no debido a un cambio estructural profundo, ya que el tiempo de gobierno no es el suficiente, y los rezagos de una crisis de gobernabilidad aún tienen sus consecuencias.

El Ecuador del 2024 es un país: a) más seguro, debido a la determinación de las acciones militares y el vuelco de timón a la intervención de las Fuerzas Armadas en barrios y cárceles, b) sin apagones, debido a la correcta gestión de la importación de energía y el incentivo del consumo responsable, pero sobre todo en el sector empresarial, en donde los beneficios ofrecidos llevaron a la autogeneración, c) con mayor marco normativo para en un futuro privatizar o crear un oligopolio de empresas técnicas que contribuirán a crear empleos, y d) con mayor control sobre fallos judiciales y mafias enquistadas en la narcopolítica. No obstante, la mayoría de estas acciones obedecen a decisiones que pueden diluirse con el tiempo, pues no son implementadas como un plan estratégico, sino como un resultado de un análisis de necesidad puntual.

Lo primero es el país

Alea Iacta Est

Así como existen aspectos a favor, también existen aspectos en contra, y es hoy en día en donde el presidente Daniel Noboa tiene la obligación de terminar de raíz las mafias que no permiten lograr la rentabilidad de las empresas públicas del Ecuador. Con la decisión acertada o no, de ingresar a la embajada mexicana, el Ejecutivo acaba de romper el acuerdo de gobernabilidad implícito que existía con la fuerza política que representa ahora a la oposición. Si el Gobierno fue capaz de decidir esta acción para dar un golpe de autoridad sobre las conciencias de la vieja política, que se acostumbró a robar al pueblo ecuatoriano sin recibir castigos, está también en la obligación de eliminar de la estructura del Estado a todas las mafias que se han enquistado desde la época de Rafael Correa Delgado.

Noboa sobrestima el poder del maquillaje político

Existen autoridades de diversas entidades públicas que responden a la consigna de este líder, y pertenecen a grupos fácticos que realizan las mismas actividades que el Ejecutivo condena y por las cuales ingresó a la embajada mexicana. Mientras las autoridades de las empresas públicas no sean técnicas y comprometidas, todos los logros alcanzados estarán revertidos a finales de año, y empezarán los problemas a los que se ha acostumbrado el Ecuador desde hace muchas décadas atrás. Por otra parte, se deben controlar de manera rigurosa las especulaciones que se crean sobre la subida del IVA y posteriormente si sube el precio del combustible. El Gobierno indica claramente que los bienes y servicios no deben presentar un incremento mayor a lo sugerido, pero las personas que hacen sus compras día a día observan un aumento de los precios en la canasta básica inclusive.

Seguramente estos aspectos están en el plan de Gobierno ya sea para este o el otro periodo, pero ante la nueva realidad política del país, es necesario tomar acciones inmediatas que concluyan con mejorar la eficiencia y, por ende, los ingresos de las diversas empresas del país, como un paso previo a analizar si realmente conviene su venta, concesión u otras acciones enmarcadas a mejorar el desempeño. (O)