Es muy probable que sigamos viendo a los candidatos trotando, buceando, mostrando los tatuajes, antes que explicando su propuesta para resolver alguno de los grandes problemas que aquejan al país. Está demostrado que es más probable que a un candidato lo elijan por salir en zapatos rojos que por tener la propuesta ganadora para resolver la crisis de seguridad, la fiscal o la del Seguro Social. Luego no sorprende que seguimos igual de estancados –crecimiento promedio del PIB per cápita entre 2014 y 2024 es de apenas 0,6 %–, aunque con problemas cada vez mayores.

El consultor comunicacional Andrés Seminario explica que hace mucho tiempo las empresas elaboraban productos y en torno a estos desarrollaban su marca, mientras que hoy las personas están interesadas en otras personas, de manera que las personas son las marcas. Seminario indica que actualmente 95 % de las cuentas con más seguidores in Instagram y en TikTok son cuentas personales y más del 70 % de las cuentas en X con más seguidores también lo son. En Ecuador no es distinto: más del 90 % de las 50 cuentas con más seguidores en Instagram son cuentas personales.

Así como en el mercado comercial han perdido poder las marcas corporativas ante las marcas personales, en política han perdido poder las marcas de los partidos políticos o el alineamiento ideológico ante la marca personal del candidato. Por otra parte, los grandes influyentes ya no son los medios tradicionales. Se estima que, en la última campaña presidencial en Estados Unidos, Joe Rogan con su pódcast tuvo más influencia que CNN.

Y va de nuevo...

Democracia, ¿medio o fin?

Seminario dice que los políticos quieren el poder y la gente quiere soluciones. Pero lo que también dice es que la gente cuando decide su voto, no se fija tanto en propuestas de soluciones sino más bien en la “marca personal” que le genera o no confianza.

Estando así el panorama, solo queda la esperanza de que la sociedad civil a través de gremios, organizaciones privadas y sin fines de lucro y, sobre todo, a través de los nuevos megainfluencers obliguen a los dos candidatos a hablar de manera específica de sus propuestas para los principales problemas que aquejan al país. Otra alternativa es que los candidatos sumen a su “marca personal” propuestas de gobierno.

Quienes se animen podrían tomar como punto de partida los ejes de reforma que el Foro Libertad y Prosperidad del Instituto Ecuatoriano de Economía Política consideró que son los más importantes: (1) ¿qué tamaño del Estado queremos tener y qué carga tributaria lo financiará?; (2) ¿qué política laboral implementará para fomentar la creación de riqueza y empleos?; (3) ¿qué solución propone a la inminente quiebra del seguro social?; (4) ¿continuará por la senda de la apertura comercial?; (5) ¿conviene integrar al sistema financiero del Ecuador con el del resto del mundo? Desde el Foro acordamos cinco propuestas de reformas a estos problemas. ¿Cuáles son las de los candidatos?

A estos ejes de reforma le agregaría preguntas relacionadas a una democracia liberal: (1) ¿libertad de expresión y asociación?; (2) ¿separación de poderes?; (3) ¿respeto a la oposición política? Hay más, pero menciono estos tres porque parece que muchos no recuerdan que hace menos de una década estos tres elementos prácticamente dejaron de existir. (O)