La mayor ruindad y bajeza que delincuentes condenados por corrupción y sus enceguecidos seguidores, que no leen documentos ni reparan en los hechos, se burlen de una dama, madre y viuda, que perdiera a su valiente esposo, asesinado en su casa por oponerse a la compra pública de siete helicópteros Druhv, que resultó un fracaso, con irregularidades y fallas, con dineros públicos y cubierto por un seguro estatal, corroborado en informes técnicos.
Por ello resultó una barbaridad que un juez nacional haya sobreseído a los presuntos responsables de esta adquisición, en una prueba más de la impunidad, sin reparar que cuatro de esas aeronaves se cayeron, a las tres restantes se prohibió que vuelen por el peligro que entrañaban y porque además murieron tres tripulantes. Qué más pruebas de esta mala compra y que como secuela de ello se persigue y se asesina a quien se opuso a la adquisición y que le advirtiera al propio mandatario de entonces, quien estuvo bien enterado.
Doce años y medio buscando la verdad, agobiada por las circunstancias, asediada y perseguida por el poder de turno desde cuando le asesinaron a su esposo en diciembre del 2010. Nunca renunció a su objetivo: que se esclarezca y se encuentre a los autores intelectuales del crimen execrable de su esposo, general Jorge Gabela, excomandante de la FAE.
A Patricia Ochoa Santos le habían engañado tanto con informes adulterados, mutilados, aumentados, tantos ministros y autoridades que hicieron lo que quisieron, abusando del poder, pero en la vida no hay crimen perfecto y el peritaje refleja los hechos ocurridos con pruebas y documentos que se rehicieron por mandato de la Corte Constitucional (CC), que jugó un papel fundamental al aceptar la acción extraordinaria de protección propuesta por la Defensoría del Pueblo y la insistencia y persistencia de la viuda.
Patricia ha tenido el coraje de desafiar al poder y lograr un avance, aún incompleto hasta no procesar a los autores intelectuales que intervinieron e incluso ordenaron un seguimiento sistematizado a quien luego fuera asesinado en su domicilio. Merece un justo reconocimiento por su valentía y tenacidad, que contrasta con la cobardía de sus detractores y de quienes se allanan y aceptan las injusticias y la impunidad.
La CC por unanimidad declaró la vulneración de derechos y dispuso medidas de reparación y la garantía a la información pública y a la verdad. Dio plazos concretos a las diversas autoridades en su sentencia 2366-18-EP/23, del 9 de febrero del 2023, cuando ni siquiera se pensaba en la muerte cruzada, la disolución de la Asamblea y las consecuentes elecciones presidenciales y legislativas. Por ello la miseria humana de quienes insinúan malévolamente que este tercer producto que señala a los autores intelectuales se presenta en medio de un proceso electoral.
Luego de las observaciones y consideraciones que se puedan hacer al tercer producto presentado la semana pasada, la Fiscalía y la Contraloría están en la obligación de investigar, cada cual en su competencia, para impulsar juicios y acciones sancionadoras correspondientes para que se procese a los culpables y que este otro caso no quede en la impunidad. (O)