1) Alguien señalaba: algunos (europeos, japoneses y más) creían disfrutar de la playa, confortablemente protegidos por el salvavidas norteamericano; pero se han dado cuenta de que varios (China, Rusia, Irán y EE. UU.) siguen pensando como hace 100 años cuando buscan hegemonías y leen el planeta como un tablero geopolítico… y de repente los bañistas posmodernos salen despavoridos. Es el mundo real, cuando creíamos que las conquistas eran solo económicas (ganar mercados) y ya no estratégicas.

2) Quizás la globalización ya no será la misma. Bloomberg: “… El ‘desacoplamiento’ de la economía global en las zonas china y occidental se ha ido acelerando, tendremos un Este autocrático separado gradualmente de un Oeste democrático…”.

... la reciente erosión del consenso político en ambos países podrá llevar a un predominio insostenible.

3) Cambia también cómo se mira a la globalización desde las empresas. Bloomberg: “En la batalla intelectual entre Fukuyama (fin de los conflictos) y Huntington (choques), los empresarios tomaron el lado de Fukuyama: la democracia no siempre ganará, pero la economía sensata sí (…). Pero ahora, frente al irracionalismo, los que solían avanzar basados en el ‘justo a tiempo’ (just in time) ahora buscan el ‘por si acaso’ (just in case): agregar una producción ineficiente más cerca de casa. Los capitalistas ahora son huntingtonianos”The Economist: “Este nuevo modelo tiene que ver con la seguridad, no con la eficiencia: hacer negocios con los que se puede confiar”.

4) ¿Una oportunidad para Latinoamérica? Larry Fink: “Todas las empresas nos preguntan ¿cómo minimizamos la dependencia? Si Brasil, México o Colombia dicen ‘estamos abiertos para negocios’, vamos a ver más empresas empujando el nearshoring (externalización de servicios con empresas de un país cercano) y el onshoring (compra de servicios en el exterior)…”.

5) Seguirá el enfrentamiento (peligroso) entre Estados Unidos y China, con el “apoyo” de Rusia en intereses compartidos (en particular dividir a Occidente). De ahí los conflictos: Ucrania (el poder en Europa está detrás), Hong Kong, Taiwán y más. Y la misma Latinoamérica que EE. UU. ha “abandonado” de manera errada, dejando la arremetida de China vía sectores estratégicos y deuda, de Rusia que ha puesto un pie militar e Irán con sus movimientos vía tráficos ilegales.

6) Pero este desafío tiene sus aristas… The Economist: “… Las empresas de tecnología comprenden una cuarta parte del mercado de valores mundial y la combinación geográfica se ha vuelto sorprendentemente desigual. Estados Unidos y, cada vez más, China están en ascenso, y representan 76 de las 100 empresas más valiosas del mundo. La cuenta de Europa ha caído”.

Pero la reciente erosión del consenso político en ambos países podrá llevar a un predominio insostenible. Los estadounidenses están preocupados por el declive nacional, y además, como señala Zakaria, es el país desarrollado con más división ideológica y la duda es ¿pueden aún sus facciones ponerse de acuerdo en temas esenciales? En China, el presidente Xi ve a las grandes empresas privadas como una amenaza para el poder y la estabilidad del partido, y sumado a serios desequilibrios económicos internos, su agresividad externa e interés en desacoplarse de Occidente no le augura un futuro tan brillante… ¡El mundo es tan similar y tan diferente! (O)