Tadej Pogacar, imparable hacia el triunfo final en el Giro de Italia: el ciclista esloveno fue el vencedor en solitario en la etapa reina de esta edición, la decimoquinta, con gran ventaja sobre el resto de favoritos en la llegada en alto de este domingo en Livigno.

Atacó a 14 kilómetros de la meta y fue alcanzando uno a uno a los que estaban escapados en ese momento para terminar imponiéndose con una ventaja de casi tres minutos sobre los otros favoritos. Ha logrado ya cuatro victorias de etapa en este Giro.

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En la clasificación general parece haber dado un golpe definitivo en este Giro y, salvo imprevisto, todo parece indicar que tendrá una última semana tranquila con su maglia rosa camino de la llegada final del próximo domingo en Roma.

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“Es uno de los días más bonitos de mi carrera. Tenía esta etapa en mente desde el mes de diciembre. Me he esforzado al máximo en los últimos kilómetros. Estoy feliz por ganar la etapa reina aquí en Livigno, que es uno de mis lugares preferidos de Italia”, afirmó Pogacar (UAE Team Emirates), que descorchaba ya el champán en el podio mientras otros corredores todavía estaban llegando a la meta.

Su ventaja sobre el segundo en la general, Geraint Thomas, es ya de seis minutos y 41 segundos. El veterano corredor galés fue sexto de la etapa del domingo, justo detrás del colombiano Daniel Martínez y del francés Romain Bardet.

“Está en otro planeta diferente al del resto. Simplemente, está en otro nivel”, admitió Thomas, campeón del Tour de Francia en 2018 y que dijo estar “ya contento” con ser “el mejor del resto”.

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Daniel Martínez es tercero en la general, a seis minutos y 56 segundos.

Pogacar llegó al Giro como grandísimo favorito y está sobrevolando la carrera. Su gran ambición en este 2024 es conquistar la gran ronda italiana y el Tour de Francia, algo que no consigue ningún ciclista en el mismo año desde que lo hiciera el italiano Marco Pantani en 1998. (D)