Si el estudio de idiomas extranjeros de por sí requiere un poco más de esfuerzo y compromiso por parte del estudiante, ahora más que nunca se debe ser responsable y determinado para continuar en el reto de aprender una nueva lengua.

Más que una dificultad, la virtualidad ha sido una transición a la que las personas se están acostumbrando, y realmente ha abierto nuevas oportunidades y dinámicas en el mundo educativo.

Desde el 17 de marzo de este año el Centro Ecuatoriano Norteamericano (CEN) volcó su pénsum académico a la modalidad online. Anteriormente contaban con un curso avanzado, dirigido a los que deseaban perfeccionar sus conocimientos de inglés. Actualmente, todos los módulos se manejan con esta metodología y la respuesta que obtuvo el centro por parte de sus estudiantes fue inmediata, así lo cuenta el director académico, Eduardo Icaza.

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Icaza comenta que los cursos están siendo ofertados en todo el país, ya que esa es “una de las ventajas de tener el curso en línea es que no hay fronteras físicas y eso es lo más importante que hemos considerado como una ventaja para el estudiante”.

Otra de las fortalezas de las plataformas educativas virtuales es la posibilidad de tener flexibilidad en el horario. Aunque las clases son en vivo, Icaza indica que quedan grabadas para conveniencia de los estudiantes por si no logran llegar a la hora correcta, puedan tener acceso a al contenido.

Para Marion Ingrassia, quien se dedica a la educación desde el 2003 y en la actualidad es docente de la Universidad Espíritu Santo (UEES), es un poco distinto.

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Ella ha notado que sus alumnos están más comprometidos con su materia, llegan a tiempo y se mantienen concentrados. Su forma de trabajar es participativa y todos los trabajos los realiza dentro de la clase, ya que su método en particular es de acompañamiento.

Sin embargo, como Icaza, resalta los beneficios de poder subir la clase grabada a la plataforma que utiliza la institución, pues menciona que eso ayuda a los chicos en temas de pronunciación y también si no comprendieron algo. Los idiomas se pueden aprender a partir de distintas edades y para cada grupo la educación virtual puede ser difícil por diferentes razones.

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El director académico del CEN aconseja que para los niños y adolescentes, los padres deben hacer un seguimiento en su educación a modo que los menores puedan integrar que es una nueva forma de aprendizaje.

En el caso de los adultos las consideraciones son otras; trata más sobre una autodisciplina pero también saber sentirse cómodos en los espacios que usarán para atender a sus clases. Esto último es algo necesario para todos aquellos detalles pueden hacer una gran diferencia en el nivel de atención. Claro está que una buena conexión a internet en imprescindible pero si a caso llega a fallar, la clave se encuentra en no frustrarse por ello y continuar con los recursos que se tengan.

Así culminaron las clases en Instituto King Sejong de la Espol, que iniciaron el 16 de marzo y duraron hasta el mes de junio. Este instituto es dependiente del Ministerio de Cultura de Corea del Sur, por ello la calificación final la ponen en aquel país para aprobar el correcto aprendizaje del idioma en los estudiantes.

El método es riguroso, explica María Cecilia Moreno, directora del plantel. Como parte de las actividades habituales de King Sejong, se encontraban aquellas relacionadas a la cultura como por ejemplo, el día de vestir un traje típico de Corea del Sur o cocinar la comida del país. Sin embargo, nada de eso pudo ser realizado por las limitaciones que trajo la pandemia consigo.

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Flavia Santa Roza, docente del Centro Cultural Brasilero, menciona que ella prefiere las clases presenciales, dice que la interacción en persona no puede ser igualada mediante la virtualidad, pero en todo caso es la única opción que les quedó a ella y otros maestros para seguir impartiendo sus clases.

Al comienzo de la pandemia, Santa Roza confiesa que sufrió, que intentaba pero fallaba en el uso de las herramientas tecnológicas. Sin embargo, fueron pasando los días y para superar las adversidades se necesitó constancia.

Así como ella se conecta a la clase y hace que sus alumnos practiquen sus habilidades orales mientras describen su día u objetos dentro de sus casas, de la misma manera Santa Roza, se tuvo que guiar a sí misma para aprender sobre tecnología. Tutoriales en la web es lo que ella utilizó para aprender de manera rápida y eficaz las herramientas que le ofrecía el mundo online y que de a poco fue dominando hasta sentirse más cómoda. Eso sí, el dinamismo de sus clases es el que nunca cambia.

La Alianza Francesa en etapa virtual

La Alianza Francesa con sus varias sedes en el país, también comenzó el 17 de marzo con sus cursos en todos los niveles a modo digital. El director Javier Zetain cuenta que para el período que duró entre marzo y junio, se inscribieron 230 alumnos en los diferentes niveles que oferta la Alianza Francesa.

Según cuenta, al inicio las dificultades eran técnicas, ya que no todos los estudiantes tenían el mismo nivel de conexión a internet. Los profesores, por su parte, fueron capacitados para utilizar las herramientas con las que se están manejando: Zoom y Apolearn. Esta última la utilizan para subir textos, realizar actividades y demás cosas del contenido de los cursos de francés.

Zetain sostiene que aún no se sabe cuándo se podrá regresar a las aulas físicas y que ellos están esperando el pronunciamiento de las autoridades en cuanto a ello. Sin embargo, también ha pensado cómo los beneficios de la virtualidad pueden ser incluidos para cuando ya se pueda retornar a la modalidad presencial. “Podríamos integrar los trabajos en la plataforma a nuestros cursos presenciales”, dice.

Una fusión del 80% en personas y 20% de forma virtual es lo que el director de la Alianza Francesa piensa como una propuesta para presentar a los alumnos más adelante.

Por el momento, el director ha podido identificar que el aprendizaje de los estudiantes está siendo eficiente de esta manera online. La pandemia obligó tanto a la Alianza Francesa como a otros centros educativos de idiomas a adaptarse a la nueva educación, algo que se está logrando con éxito en organizaciones como esta, las que junto al resto del mundo están viviendo una nueva experiencia y la manera de hacer las cosas

Las dificultades entorno al manejo de plataformas digitales y demás, quedan en segundo plano cuando los profesores están preparados para entregar lo mejor de sí, tal y como en un curso presencial. Las dinámicas y actividades se vuelven primordiales en la modalidad virtual, ya que los alumnos tienden a perder concentración de forma rápida. (F)