‘El amor es un recorrido de aprendizaje’ así lo expresó Jaime Rosales, director de ‘Girasoles Silvestres’

Jaime Rosales hace su regreso magistral a la competencia oficial del Festival de San Sebastián desde el 2008 con Girasoles silvestres, catalogada como una fuerte experiencia sensorial llena de masculinidades.

Durante su encuentro con la prensa, en este 70 aniversario del Festival, el director español habló sobre su primera reunión con sus protagonistas, como fue la elección del elenco y lo satisfecho que se sintió con ellos. Además, comentó la interpretación de Oriol Pla -su actor ancla- en el papel de Óscar: “Es la única película donde he sentido miedo de alguien, durante una escena que habíamos ensayado, Oriol estaba muy metido en el personaje, muy enfadado. Tenía miedo que me podía pegar también a mí, impresionante”.

La historia sigue a Julia, interpretada magistralmente por Anna Castillo, es una joven madre soltera de dos niños, quien se enamora de Óscar, pero a medida que pasan tiempo juntos, ella comenzará a replantear su relación y si él es la persona que realmente necesita a su lado, llevándola a comenzar un viaje personal en busca de su felicidad.

“Es importante quitar el victimismo en el personaje. Julia es alguien muy fuerte y resistente a las dificultades de su vida, pero en lugar de victimizarse busca una solución, es algo que ella constantemente quiere hacer. Ella busca un hombre más moderno, que contribuya a varios factores y que tome espacio de su tiempo para ella, ese tipo de hombre que es el que está facultado para montar una familia y al final se queda con la chica, algo tan hollywoodense”, expresó su director.

“El cambio de parejas, tiene también que ver con el aprendizaje del amor, a través de la experiencia, probando cosas y personas que son muy diferentes. Si algo falla buscamos otro tipo de persona, esa variación y psicología asociada me interesaba, referente con el tipo de hombre que buscaba uno más primitivo, para luego pasar a uno más evolucionado”, señaló.

“Estoy convencido que para que una relación dure con el tiempo, uno tiene que dar un paso, esa diferencia centrípeta me parece muy bonita, porque ese paso lo da un personaje masculino. El personaje de Anna lo recoge y lo recibe”.

Anna Castillo, sobre su experiencia previa para la interpretación de Julia indicó: “Yo creo que hay algo del personaje que he sentido, he visto madres con carga, que apartan sus necesidades, sus deseos, porque están solas, que siguen adelante por el bienestar de sus hijos, madres luchadoras que al final son muy jóvenes y viven en un sistema patriarcal, con masculinidades muy tóxicas, que navegan por esos mares muy complicados. Rodamos en el barrio donde yo crecí, y siempre he sentido eso. Mujeres de mi familia, madres que son muy jóvenes que hacen lo que pueden. Y me he dado cuenta desde hace unos cinco años que es una maternidad mucho más feminista ahora”.

Su productor Adolfo Blanco relató lo abierto que fue Rosales a sus sugerencias para la película: “Nos contó la historia con un dibujo, y el dibujo no es la película, era otra historia. La misma historia, pero con matices que han ido cambiando y en Jaime hemos encontrado una persona receptiva, talentosa, que cuando uno sugería algo, él lo recibía. Un viaje con un director que quería hacer una película para el público, una persona permeable a la que se le podía sugerir algo, aunque fuera distinta a su idea original de la película”, concluyó.

Girasoles Silvestres ha iniciado de esta forma su competición por la Concha de Oro, cuyos ganadores serán anunciados el próximo 24 de septiembre.