El cigarro, puro o habano ha estado siempre ligado a la gastronomía, quizá más en el pasado que en estos tiempos. Pero siempre ha sido parte del buen comer y buen beber, aunque hoy muchos conocedores de gastronomía estén en contra de ligar el cigarro a la cocina porque a su entender, el humo afecta las papilas gustativas.