* Este reportaje fue realizado días previos al anuncio del toque de queda y estado de excepción en Guayaquil. Este evento, previsto originalmente para las 20:00, iniciará el viernes a las 18:45, las entradas cuestan $15.

Que Guayaquil tenga un constante intercambio cultural con España y sus exponentes de flamenco es uno de los objetivos con los que nació en 2021 la agrupación GYE Flamenca, de la mano de la también bailaora ecuatoriana Camila Valdiviezo y el guitarrista Santiago Cárdenas, radicado hoy también en nuestro país.

“En Guayaquil hay tanta afición al flamenco, así como academias, escuelas y compañías que ofrecen mucha apertura para poder practicar este baile (...) Así como todas las capitales del mundo tienen su tablao flamenco y su oferta flamenca con música en vivo, ¿por qué Guayaquil no la tiene de manera constante?”, reflexiona Camila, quien el año pasado lideró una temporada de seis semanas vinculadas a esta expresión artística.

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¿Cuáles fueron los objetivos para este 2022?

Este año dijimos redoblemos la apuesta y, en lugar de hacer seis semanas, hagamos seis meses de actividades, por eso, esta temporada se inició el 14 de junio y terminará el 14 de diciembre.

¿Qué actividades han realizado hasta el momento?

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Realizamos una pequeña colaboración con el Teatro Sánchez Aguilar e hicimos tablados flamencos en su espacio al aire libre y también estuvimos en Las Tablas (malecón del Salado). Además, en julio tuvimos el primer retiro a la playa con contenido de flamenco, fueron tres días en San José (Santa Elena) y vamos a hacer el segundo el próximo 18, 19 y 20 de noviembre.

¿Cuál será su siguiente actuación?

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Nuestra siguiente actuación abierta al público es el tablado del viernes 11 de noviembre en el barrio Las Peñas, que es como un hito para mí el poder entrar en esa escena cultural, con la importancia que tienen tanto esa zona como la Casa Cino Fabiani.

¿Qué tienen preparado para la Casa Cino Fabiani?

Es un escenario muy especial con mucha mística, de hecho el escenario estará frente a una roca grande que tienen ahí expuesta del cerro Santa Ana y vamos a ofrecer un tablado flamenco al estilo Andaluz, igual como si el público estuviese en España. Participarán el guitarrista Santiago Cárdenas, quien se formó en Estados Unidos y en España y que reside en nuestro país. Estará Alexis Elmenderí, un cantaor francés, radicado en España y que está de visita en Ecuador y Renata Ruiz, que es nuestra bailaora invitada y vive y trabaja del flamenco en Sevilla y viene de una gira por México, Francia y ahora viene a Guayaquil. Además de mí, que también bailo.

Juntos, vamos a ofrecer una hora de flamenco con música en vivo. Serán aproximadamente seis palos del flamenco que vamos a poder disfrutar en 60 minutos con un intermedio de entre 10 y 15 minutos para disfrutar también de las tapas y las bebidas que ofrece la Casa Cino Fabiani.

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El guitarrista Santiago Cárdenas estará en la Casa Cino Fabiani. Fotos: cortesía de Luis Eduardo Albán.

¿Cómo sientes que ha ido creciendo la audiencia aficionada al flamenco?

Hemos afianzado ese público fiel al flamenco que ha repetido tablaos y eso nos gusta muchísimo, tener a ese público fiel que estaba ávido de tener mucho flamenco en Guayaquil y por otra parte, cada vez vamos encontrando público nuevo que también era algo muy importante para nosotros. Por ejemplo, este año uno de nuestros objetivos era llegar a adultos mayores y que puedan disfrutar de una propuesta de calidad y pudimos hacerlo gracias a la Universidad de Especialidades Espíritu Santo con la iniciativa UEES Flamenca (...) y además con otras actividades, nos dio un impulso muy grande para conseguir nuevos públicos en chicos que estudian otras artes y que no tenían acercamiento al flamenco.

¿Cuáles son sus próximos pasos?

Mi objetivo sería llegar ahora a otro público, los niños pequeños, en su primera infancia, es decir, de entre 1 y 4 años, en sesiones de estimulación cognitiva con flamenco. Y también tenemos planificado viajar a Esmeraldas y a Quito.

¿Qué elementos del flamenco invitas a las personas a apreciar en cada presentación?

Algo que creo que engloba todo es que se aprecie la comunicación que hay entre los músicos y las bailaoras en el flamenco. Esa intimidad que se crea en el elenco es muy importante, la conexión que se tiene entre los cuatro, en este caso, que vamos a estar en escena ese día. Entonces, disfrutar la complicidad y cómo manejamos este lenguaje no hablado para poder amalgamarnos y hacer que se sienta una sincronía muy viva, también porque en el flamenco hay elementos de improvisación importantes.

Luego me gusta mucho que la gente pueda notar los matices que tiene el flamenco, es decir, que no todo es hondo, profundo, oscuro o íntimo, pero tampoco todo es alegre y de algarabía, ni tampoco todo es fuerza, o sea, hay momentos del baile llenos de delicadeza y de movimientos muy sutiles, y luego, momentos de un poco de coquetería corporal (pellizcos), mientras que se emana mucha energía en los remates de los bailes. Entonces se crea un ambiente muy dinámico, donde nada es plano, sino que se pasa por muchos estadios y por diferentes dinámicas, tipo de energía.

Y finalmente sería bueno interiorizar el lenguaje musical, estar atentos a las técnicas específicas que requiere el flamenco para la guitarra, por ejemplo que es distinta a la guitarra eléctrica o la guitarra clásica. También hay fuerza en la voz, en el cante, notar ese quejido flamenco que a veces pensamos que no entendemos las letras, pero son frases y palabras que se alargan y van encaminadas según el sentimiento y la intención que el cantaor quiere dar.