La batería es una de las piezas más importantes del auto, pues es la encargada de proporcionar la energía eléctrica para que el vehículo arranque y funcione. Pero, así como hay una amplia variedad de vehículos, también hay diferentes baterías que sirven mejor dependiendo del modelo del automóvil.
Escoger la batería adecuada para el vehículo no debe ser una decisión ligera, ya que si no es lo suficientemente potente puede afectar el rendimiento del auto, o puede desgastarse rápidamente y necesitar un cambio prematuro.
Pero, ¿cómo saber qué batería es la mejor para tu auto? Además de tener en cuenta las especificaciones del vehículo, se deben comprender las características de cada tipo de batería. Aquí te las explicamos.
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Baterías de plomo-ácido inundadas
Estos son los tipos de batería más tradicionales, que funcionan con ácido sulfúrico líquido, o electrolito, que reaccionan al entrar en contacto con las placas de plomo del interior de la batería. Esta corriente eléctrica que genera la batería es la que arranca el motor y potencia los componentes electrónicos, como la radio o la calefacción.
Debido a su durabilidad y precio económico, es una de las baterías más usadas en autos convencionales. Pero su producción no es sostenible, por lo que podría reducirse su oferta en el mercado automovilístico en los próximos años.
La vida útil de una batería de plomo-ácido inundada es de 3 a 5 años, o el equivalente de 30.000 arranques del motor en temperaturas normales. En el frío o el calor extremo es probable que la capacidad de la batería se vea reducida.
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Baterías de plomo-calcio
Las baterías de plomo-calcio se componen de placas de plomo y óxido de plomo en combinación con un electrolito de calcio. Produce energía a partir de la reacción química que generan las placas y el electrolito al entrar en contacto.
El electrolito de calcio es menos corrosivo y tóxico, por lo que la batería resiste mejor las vibraciones y las fluctuaciones de temperatura. Además, tiene una vida útil más larga y soporta más ciclos de carga y descarga.
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Una de las desventajas de este tipo de batería es que tiene una capacidad de energía levemente inferior, y también puede ser menos económica por su elevado costo de prducción.
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Baterías de litio
Las baterías compuestas de iones de litio son más comunes en autos eléctricos e híbridos, pues permite recargar la energía para seguir usando el vehículo. Funcionan con un electrodo negativo de carbono, un electrodo positivo de litio y un electrolito de polímero de litio para almacenar la energía.
Debido a su mecanismo de recarga, el tiempo de vida de estas baterías es entre 10 y 20 años, dependiendo al uso y mantenimiento que se le dé al auto. Con los años, la batería puede tardar más tiempo en recargarse, y acabar con su energía cada vez más rápido. Esos son los signos a los que debe prestar atención el propietario para saber cuál es el momento ideal para reemplazar la batería.
Las baterías de litio son de las menos ecológicamente sostenibles en el mercado, y su costo de producción es alto.
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Baterías de vidrio absorbente (AGM)
Estas baterías cuentan con separadores de fibra de vidrio, que son absorbentes y almacenan el electrolito en estado seco, con placas de plomo entre los separadores. Esto las vuelve especialmente seguras, ya que por su diseño no pueden derramar ácido y soportan más corriente de carga.
Además, combinan el oxígeno y el hidrógeno producidos durante la carga para generar agua directamente en la batería y recompensar la pérdida.
La vida útil de las baterías de vidrio absorbente es de alrededor de unos 7 años, y se recomienda para los climas fríos, ya que es menos resistente a las altas temperaturas.
Baterías de gel
Las baterías de gel utilizan gel de ácido sulfúrico como electrolito, y son una variante de las baterías de plomo-ácido. Al ser selladas, no se derraman y son libres de mantenimiento.
Esto les permite resistir a las vibraciones y a los golpes, por lo que funcionan muy bien con los vehículos todo terreno. Además, tienen un tiempo de vida más largo que las baterías de plomo-ácido convencionales.
Como desventaja, tienden a ser más caras que las baterías convencionales y tienen una menor capacidad de corriente de arranque en temperaturas frías.
Para elegir la batería indicada para el vehículo, se debe tomar en cuenta además las indicaciones del fabricante, el presupuesto del propietario y el mantenimiento que se le planea dar al auto. Verificar regularmente la batería y limpiar sus terminales contribuirá a que no se agote su tiempo de vida prematuramente. (I)
