La ‘buena onda’ es el vibe que siempre ha caracterizado la música de Ricardo Pita, pero ahora sin necesidad de ser negativo -así lo aclara- busca ponerle voz y acordes a la esencia de Latinoamérica y a sus problemas sociales, que tanto azotan a la región. Será ésta la temática por la que estará atravesado su próximo disco El grito de las suciedades, que contendrá cuatro sencillos.

“Siempre he tenido en mi música este mensaje de unión y hermandad; y por más que eso se mantiene en este disco, hay un poquito más de un tono de denuncia. Estamos intentando unificar las luchas de las minorías”, expresa de su nuevo proyecto musical, desde un Zoom con EL UNIVERSO.

“Cada canción va a ir de la mano de eso, intentando dar espacios a esas luchas que quedan un poco olvidadas, cuando somos golpeados por cosas duras como la delincuencia, el narcotráfico o los malos gobiernos, acota el artista que tiene previsto lanzar el disco completo con el cuarto sencillo.

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Describe a este nuevo proyecto como un “redespertar”. “No tiene nada de oscuridad levantar la voz y decir las cosas que no están bien, es más como un llamado a la rebeldía, a la originalidad”, manifiesta.

El primer tema de este disco se titula Tanto, y hace un mes ya se lo puede escuchar en todas las plataformas digitales de música. A través de unos sonidos muy cercanos a la samba brasileña o a los beats africanos, en esta canción Pita rinde un tributo a los migrantes.

El disco fue elaborado durante el confinamiento de la pandemia del covid-19, junto a su productor. “Es orquestado con sintetizadores y los beats son electrónicos, es un concepto que se crea desde esa soledad, pero añorando la bondad de estar juntos”, dice.

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Una experiencia que le cambió la vida

Ricardo Pita, cantante ecuatoriano. Foto: Cortesía

A pesar de describirse como una persona empática con las luchas de los demás, reconoce que es diferente cuando se lo vive de primera mano. Recuerda la vez que fue detenido por 30 horas por la migración mexicana en el 2019, impidiendo llegar a cumplir con una presentación en un festival musical donde estarían artistas como Kevin Johansen, Natalia Lafourcade, Pablo Milanés, Silvio Rodríguez, entro otros.

Pese a este “infierno” que vivió, destaca la bondad con la que se encontró de migrantes de varias partes del mundo. “Te hacían hermano porque estabas viviendo una situación similar. Te daban la mano (...) entonces, para mí hubo un despertar con eso y el disco empieza a nacer después de esa experiencia (y de la pandemia)”, relata.

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Pero fue un oficio en particular, que lo puso frente a frente a la necesidad, y ese fue el de constructor. “La segunda mitad de la pandemia me fui a vivir fuera de la ciudad y estuve trabajando como obrero en una construcción durante un año, algo que nunca había hecho; yo siempre me he dedicado a la música y nunca he tenido un trabajo de de 09:00 a 17:00″, cuenta.

“Tener un trabajo así de levantarme en la mañanita y regresar todo lleno de grasa y lodo, haberme quemado y cortado, pero con una cosa en el alma muy llena, es una de las experiencias más increíbles”, afirma el guayaquileño que recuerda a sus compañeros de obra con mucho cariño. “La segunda mitad de su día se dedicaban a ser pescadores, salí a pescar con ellos, me terminaron invitando a las quinceañeras, al cumpleaños de la abuelita. Esto fue de volver a poner los pies en la tierra”, apunta con mucha sensibilidad.

Cuenta que también laboró en el departamento de metal mecánica, donde los mismos ruidos de electricidad los imaginó en su mente como notas musicales. “Si tienes un oído musical, terminas escuchándolos como beats electrónicos”, dice Pita, quien se nutrió de todas estas experiencias para su nuevo disco.

“Creo que va de la mano de cómo el disco terminó sonando con estos beats electrónicos, y pues tiene que ver con mi acercamiento con la electricidad de repente, no sé si fue cuando me cogí la corriente por ahí soldando, pero hay muchas cosas que conectan ahí”, menciona.

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Su próximo estreno

Su segunda canción se llamará Paren que me bajo acá, que la describe como un llamado a la acción en contra de las estructuras obsoletas y malas prácticas de la sociedad. Este tema será presentado este domingo 21 de julio en el Festival de la Calle Córdova, liderado por el colectivo cultural La Culata. (E)