Una casa, de color amarillo, permanece sellada en la calle Azuay 412 entre Chile y Chimborazo, sur de Guayaquil. La puerta, ventanas y el balcón fueron cubiertos con cemento hace unos tres años, según moradores del sector.

“Ahí vivía una familia hasta hace unos cinco años, más o menos. Creo que el IESS les embargó la casa”, cuenta un vecino sobre esta vivienda, de 332 m² de construcción y que está valuada en $ 80.212, según la valoración del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Este bien requiere, según la entidad, “mantenimiento preventivo y correctivo para adecentamiento de fachada, que incluye puertas principales, rasqueteada, empaste y pintura”.

Este y otras cinco propiedades del IESS constaba en una lista enviada por la coordinadora provincial administrativa financiera de Guayas, quien recomendó –en septiembre de 2022– un plan de mantenimiento de predios dentro de la proforma presupuestaria del 2023 del Seguro de la Pensiones y Riesgos de Trabajo. Pero este año, recién en diciembre, el IESS inició un proceso de contratación para adecuar las instalaciones de uno de ellos: la casa vacacional en Playas, por $ 60.101 y un plazo de 30 días.

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IESS invertirá en una casa vacacional en Playas, inhabitada hace años

Una de las viviendas, la única habitada, está ubicada en las calles Febres Cordero y Pío Montúfar. Foto: Francisco Verni

En total, el IESS tendría más de 1.350 inmuebles, de los cuales 900 tienen uso institucional y unos 500 no estarían siendo utilizados por el Seguro Social, según Henry Llanes, dirigente de la Asociación de Afiliados, Jubilados y Pensionistas del IESS, quien cuestiona que el IESS no tiene una “infraestructura cuidada, mantenida, como debe ser, para hacer uso de la misma institución o para crear programas de vivienda o para vender los terrenos. Prácticamente no hay, no tienen esa política y gestión empresarial para que el Seguro Social maneje esos recursos”.

En tanto, las cinco edificaciones que se menciona en la lista del IESS están en el centro y sur de la ciudad y aún no han sido intervenidas ni contratadas. Solo una de ellas, en Febres Cordero 1210 y Pío Montúfar, tiene 256 m² de construcción y está valorada en $ 44.514. Es la única vivienda habitada, de construcción mixta, de dos plantas, que está dividida en dos departamentos. En la planta alta vive una pareja de adultos mayores y, en la planta baja, habita una familia de tres integrantes.

“Hace trece años arrendamos al Seguro Social”, cuenta Fernando, afiliado inquilino que considera que “solo hay que pintar, porque yo ya le hice el cambio de instalaciones eléctricas, porque tenían redes antiguas”. En cambio, su esposa asegura que “cuando llueve torrencial parece cascada (una pared de la casa)”, por lo que también se requiere impermeabilizar.

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Hay dos viviendas del IESS, una junto a la otra, desocupadas hace más de una década, en las calles Pio Montúfar y Capitán Nájera. Foto: Francisco Verni

Esta familia asegura que cancela $ 200 por el alquiler del departamento, que tiene sala, comedor, cocina, dos habitaciones y patio, espacios que cada cierto tiempo –detalla– son inspeccionados por funcionarios del IESS: “La última vez que vinieron fue hace tres, cuatro meses, para ver la casa y comprobar si nosotros vivimos o subarrendamos”.

A la vuelta de esta casa, en Pío Montúfar y Capitán Nájera, quedan otros dos bienes, también de construcción mixta y de dos plantas, una de 244 m² y la otra de 217 m². Su fachada está deteriorada, las puertas de madera desgastadas, la pintura soplada y faltan vidrios en las ventanas del primer piso. “Están vacías hace más de diez, quince años”, dice un morador; mientras otro vecino añade que “hay un señor que entra y sale, que dice que cuida”.

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Estas propiedades, valoradas en $ 30.970 y $ 27.898, requieren “mantenimiento preventivo y correctivo para adecentamiento de fachada, incluyendo iluminación de portal, mantenimiento de puertas, rejas, cambio de ventanas planta baja y planta alta, mantenimiento al sistema de drenaje aguas lluvias, cambio de piso de madera del portal, rasqueteada y pintura, y tratamiento antihongo”.

En la calle Lorenzo de Garaicoa 3705 y Colombia queda una casa, de una planta, que está llena de maleza y sin ningún uso hace unos cinco años. Foto: Francisco Verni

El quinto bien del IESS es una casa con solar, de 191 m² de construcción y valorada en $ 56.697, en Lorenzo de Garaicoa y Colombia. Es el único predio que tiene dos puertas enrollables cerradas y que parece, desde el exterior, como una selva por la maleza crecida y un gran árbol que no ha sido podado hace varios años.

“Está desocupado hace cuatro, cinco años, antes funcionaba el local de un tapicero”, recuerda un comerciante del sector y afirma que “siempre vienen (del IESS) a hacer fotos, pero no hacen nada más”. En ese predio hace falta: “limpieza y desbroce de maleza; fumigación; cambio de cubierta; rasqueteada, empaste y pintura”, detalla el IESS, entidad que no atendió un pedido de información de este Diario. (I)