Hacer un recuento de las mejores películas del 2018 es algo casi tan subjetivo como preferir el helado de vainilla al de chocolate. No tan sencillo, pero subjetivo al fin y al cabo. Así que en lugar de pretender que este sea un repaso por lo mejor del año, este será un vistazo por lo que más ha disfrutado el autor de esta nota durante los pasados doce meses. Y como dicen en los concursos, los filmes se presentan sin ningún orden en particular. ¡Empecemos!

Lo primero que no podemos dejar de mencionar es la importante penetración e influencia de la plataforma digital Netflix en el mundo del cine y la televisión. Para muestra, la que en muchas publicaciones internacionales se presenta como una de las mejores cintas del año, Roma, del mexicano Alfonso Cuarón. Y no les falta razón, este retrato de una familia mexicana de los años 70 vista principalmente a través de los ojos de su empleada doméstica, Cleo, es una maravilla. Una narración sutil, en la que los acontecimientos van sucediendo casi sin que nos demos cuenta, con actuaciones naturales –encabezadas por la de su protagonista Yalitza Aparicio–, Roma es una de esas películas que solo aparecen de vez en cuando. Es poco o nada lo que se le puede reprochar al filme de Cuarón, quien no solo la dirigió, sino que también la escribió y se hizo cargo de la fotografía. Esta es una película imperdible y definitivamente de lo mejor del 2018.

También merece una mención destacada el debut cinematográfico como director de Bradley Cooper, Nace una estrella. En la película protagonizada por él y Lady Gaga, el manejo de las emociones es tan acertado que es imposible no conmoverse con lo que estamos viendo en pantalla. Sorprende especialmente la sutileza con la que se maneja Lady Gaga, famosa más bien por sus extravagancias en el mundo de la música pop. La banda sonora es otro de los puntos fuertes de esta cinta, que para los amantes de las historias de amor es una obligación verla.

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Cambiando de género y metiéndonos en el suspenso y el terror, lo más destacado del año tal vez sea Un lugar tranquilo (A quiet place). Dirigida y protagonizada por John Krasinski, la película nos cuenta la historia de un mundo en ruinas que ha sido invadido por unos seres que tienen ultradesarrollado el sentido del oído. Por esta razón, es esencial para sobrevivir mantenerse en silencio. Y es lo que ocurre durante casi toda la película, prácticamente sin diálogos, nos contagiamos de la angustia de los protagonistas, es especialmente memorable la escena interpretada por Emily Blunt en la que debe dar a luz en completo silencio, ya que de lo contrario el desenlace podría ser fatal.

Y ya que estamos en el mundo de la fantasía, de la gran avalancha de películas de superhéroes, se destaca Pantera Negra. De las cintas de superhéroes, esta es una de las buenas. Las escenas de acción son tan llamativas como deben ser, pero sin caer en excesos en los que suelen caer otros filmes de este tipo. Tiene su carga cómica, pero no es una payasada y sobre todo transforma un mundo imposible en algo creíble y verosímil.

En el caso del cine ecuatoriano, si bien este autor no ha visto todas las cintas que se estrenaron, destacan el documental Siguiente round y la cinta de terror-suspenso La Dama Tapada. Ambas producciones son un respiro dentro de la producción nacional, y dan una esperanza de que un cine ecuatoriano versátil, comercial y de calidad es posible.

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Seguramente hay muchas cintas más que merezcan mención, pero el espacio es corto y tal como se manifestó al principio de esta nota, más que un recorrido por lo mejor, este es un recuento de gustos personales que comparto con ustedes. Hasta aquí nos ha traído el 2018. (O)