Un fenómeno astronómico no muy común será visible en el cielo los primeros días de marzo. Se trata de la conjunción de los planetas Júpiter y Venus, también conocida como el beso celestial, por la cercanía que aparentan tener estos astros.

Desde este 28 de febrero hasta el 2 de marzo, los planetas luminosos parecerán ser vecinos al alzar la mirada. Esto se da porque alcanzan una distancia angular de tan solo 1°, aunque en realidad estos planetas se encuentran a más de 900 millones de kilómetros de distancia y Júpiter es 1500 veces más voluminoso que Venus.

Otro cuerpo celestial que se suele ver junto a Venus y Júpiter es la Luna. Sin embargo, la aparente alineación de estos tres cuerpos no son más que una ilusión óptica.

Publicidad

Según el Observatorio Astronómico de Quito, a las 05:35 a.m. del 2 de marzo, Venus se encontrará a 0.49° de Júpiter. La elongación mínima de los planetas son 30.8°.

El fenómeno es perceptible con el ojo humano, pero se recomienda ver el cielo al amanecer, que es cuando más brillan los planetas.

Conjunción Júpiter y Venus. Getty Images.

¿Qué significa el beso celestial en la Astrología?

Tanya, autora de la columna El Horóscopo de Tanya, explica que la conjunción de Júpiter y Venus tendrá un efecto en las relaciones sentimentales de las personas. Esto se debe a la naturaleza de ambos planetas, y a que la Luna y el planeta menor, Quirón, también estarán alineados en el cielo.

Publicidad

Júpiter representa al dios Zeus en la mitología griega, incluso su nombre es el del dios en romano. Esto lo vuelve un planeta expansivo. Según Tanya, Júpiter “es un planeta inmenso y benéfico, tiene mucha carga de expansión y está en el signo de Aries, cuyo elemento es el fuego y hace que las propiedades de Júpiter sean más dinámicas”.

Venus, en cambio, es mitológicamente Afrodita, la diosa del amor y las relaciones. “Si Júpiter es el principio de la expansión del universo y hace un contacto con Venus quiere decir que a nivel relacional, de inicios, de compromisos va a ser benéfico”.

Publicidad

Junto a esta conjunción va a estar Quirón, que para la astrología es el sanador herido, el signo donde todos tenemos un sufrimiento personal. De acuerdo con Tanya, esta conjunción quiere decir que tenemos la oportunidad de curar un problema, a nivel del amor y la expansión, si aprovechamos esta energía.

“Lo más importante de esta conjunción es que una relación que tengo se puede expandir, causarme mucho placer, muchas bendiciones, amor sensual”, especifica Tanya. Pero, si no tenemos una relación, puede significar el comienzo de una. (I)