Ese exceso de piel que cuelga desde la barbilla hasta la clavícula es lo que llamamos papada. A algunas personas se les nota antes de los 40, pero todos comenzamos a ver esa piel después de los 50.

Los hombres no suelen prestarle atención pero para las mujeres es un tema de salud e imagen que genera mucha preocupación e impotencia.

Con estos tres ejercicios puedes reducir la papada y los cachetes para perfilar tu rostro

La piel, a medida que envejece, comienza a perder algunos de los compuestos que la ayudan a mantener su forma. Imagen: Pexels

Hay muchos factores que contribuyen a su aparición.

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  • Adelgazar muy rápido, ya que la piel no adapta a la nueva figura.
  • Exceso de grasa subplatismal o superficial.
  • Que el hueso de la tiroides esté muy bajo.
  • Genética.
  • Envejecimiento.

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Cómo quitar la papada

Antes de acudir a métodos doloroso e invasivos, puedes optar por alternativas naturales que requieren de su energía.

Sin embargo, no todo está perdido. Hay maneras de retrasar su aparición o de reafirmarla.

  • Masticar más para que se ejercite esta zona de la piel.
  • Hacer estiramientos, llevando el cuelo hacia atrás, con la mirada al techo.
  • Apretar la boca y los dientes y tensa los músculos del cuello entre 10 y 15 veces seguidos.
  • Una liposucción de papada.
  • Mesoterapia.
  • Lipoescultura
  • Radiofrecuencia
  • Gimnasia facial.

(I)

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