Cuando se tiene la sensación de mucho calor es necesario aportar al cuerpo bebidas refrescantes que ayuden a una mejor hidratación y además mantengan la presión arterial en niveles normales.

En las temporadas en que el calor aumenta, la presión arterial puede bajar debido a que los vasos sanguíneos se ensanchan (vasodilatación) lo cual ayuda a disminuir la temperatura del cuerpo, explica Tu Canal de Salud.

Por su parte, Healthline señala que la deshidratación también se ha relacionado con un aumento de la presión arterial “debido a un aumento de una hormona llamada vasopresina”.

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Cuando la persona tiene un golpe de calor su temperatura puede superar los 40 grados Celsius, indica Clínica Mayo. Foto: Freepik.

Por su parte, los especialistas consultados en Cuídate Plus recomiendan consumir mucha agua para mantener el cuerpo hidratado y sugieren además otras bebidas que ayudan a contrarrestar los efectos de las altas temperaturas, entre ellos un golpe de calor.

“El golpe de calor se produce cuando la temperatura del cuerpo aumenta rápidamente y no puedes bajarla. Puede poner en riesgo la vida si provoca daños en el cerebro y otros órganos vitales”, define Clínica Mayo.

¿Qué bebida es buena para el calor?

1. Agua

La primera opción para calmar la sed es el agua y de hecho es la mejor bebida para estar hidratado, como se indica desde Cuídate Plus.

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Al día, es importante tomar al menos 2,7 litros de agua en el caso de las mujeres y 3,7 litros los hombres, destaca la Clínica Mayo.

En época de verano es necesario vigilar tu hidratación. Imagen: Pexels

2. Té o infusiones

De acuerdo con Healthline, para evitar que la deshidratación afecte la presión arterial una buena opción para refrescarse y combatir el calor es consumir té o infusiones descafeinadas.

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Entre las alternativas refrescantes están las infusiones de menta y manzanilla, que están naturalmente libres de cafeína, menciona Adagio Teas.

Foto: Freepik.

Otra opción para controlar la presión arterial es el té verde. Si bien es cierto que se puede tomar frío o caliente, tome en cuenta que cuando hace mucho calor la primera opción es una de las preferidas.

De acuerdo al sitio web Takeko’s Tea un té verde frío es refrescante y se prepara con agua templada, un método al que se le llama Mizudashi-cha.

Para preparalo solo tiene que dejar que las hojas frescas reposen en agua helada y mantener la bebida en la nevera durante una hora, así se obtiene más vitamina C, mejora el sistema inmunológico y el sabor es menos amargo.

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El té verde su puede consumir frío o caliente para regular la presión arterial y baja el colesterol. Foto: Freepik.

Si es de los que prefiere las bebidas calientes, de acuerdo al sitio web Directo al paladar estas regulan la temperatura corporal, aunque para algunos esto suene ilógico.

Al respecto, un estudio divulgado en el 2012 en la Biblioteca Nacional de Medicina (NIH) sugiere que ingerir líquidos calientes aumenta la producción de sudor y esto modula la temperatura del cuerpo y mantiene el equilibrio térmico.

3. Jugo de limón

Andrea Calderón, secretaria científica de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA), sugiere tomar una limonada natural cuando aprieta el calor.

“Lo mejor es hacerla únicamente con agua y limón, añadiéndole, si se quiere, un toque de sabor con especias como el jengibre”, agrega para Cuídate Plus.

Healthline recomienda también añadir al agua rodajas de frutas, como limón o pepino.

Un jugo de limón al natural y con abundante hielo será tan refrescante para su organismo cuando tenga sed. Foto: Freepik.

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