Es natural que cuando aparecen granos, espinillas o erupciones en nuestro rostro, la primera reacción sea intentar eliminarlos a la fuerza. Sin embargo, no todas estas imperfecciones cutáneas son iguales y, por lo tanto, no deben tratarse de la misma manera.
Existen diversas causas que pueden provocar este tipo de lesiones en la piel, más allá del típico acné y es importante diferenciarlas para cuidar adecuadamente el cutis.
Estas son las enfermedades que se manifiestan con una sudoración profusa y repentina
¿Qué pasa si exprimo los granos de la cara?
Seguro que alguna vez has sentido la tentación de exprimir ese grano rebelde que te ha salido justo antes de un evento importante. ¡Todos hemos pasado por eso! Pero, ¿sabías que esta acción, tan común, puede empeorar las cosas?
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Exprimir un grano es como abrir una puerta a las bacterias que causan la infección. Según Ilta Sanomat, al apretarlo, estás empujando ese material infectado más profundo dentro de tu piel, lo que puede provocar:
- Más inflamación y enrojecimiento: El grano se verá peor y tardará más en desaparecer.
- Cicatrices: Las marcas que quedan después de exprimir un grano pueden ser difíciles de eliminar y durar mucho tiempo.
- Infecciones: En casos más graves, puedes desarrollar infecciones más profundas en la piel.
¿Qué otro tipo de erupciones se producen en el rostro?
A veces, confundimos otros problemas de la piel con acné. Aquí te explicamos algunas de las más comunes:
- Tiña: Esta infección fúngica suele causar manchas rojas y escamosas que pican mucho, no produce pus y puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, incluyendo el rostro.
- Acrocordones: También conocidos como “fibromas blandos”, son pequeños crecimientos de piel benignos que suelen aparecer en la zona cerca de los ojos y otras partes del cuerpo donde haya mucho roce.
- Quistes: Estos bultos llenos de líquido se forman cuando un folículo piloso o una glándula sebácea se obstruyen y pueden tardar más tiempo en desaparecer, como indica Ilta Sanomat.
- Rosácea: Esta afección crónica causa enrojecimiento, protuberancias rojas y pequeñas venas visibles en la cara.
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