El papa Francisco pronunciará su mensaje navideño e impartirá la bendición ‘Urbi et Orbi’ a las 12:00, hora de Roma, (06:00 en Ecuador), del sábado 25 de diciembre.

Francisco impartirá la bendición asomado al balcón de la Logia central de la basílica de San Pedro, sin límite de aforo en la plaza, a pesar de que Italia ha impuesto más restricciones a los no vacunados de coronavirus para frenar el impacto de la pandemia.

El año pasado la bendición ‘Urbi et Orbi’ se cumplió en el interior de la Sala de las Bendiciones, un espacio más reducido, debido al aforo limitado que se había establecido por el COVID-19.

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‘Urbi et Orbi’ que en latín significa ‘a la ciudad (Roma) y al mundo’, era la fórmula habitual con la que empezaban las proclamas del Imperio Romano. En la actualidad, es la bendición más solemne que imparte el Papa, y sólo él, dirigida a la ciudad de Roma y al mundo entero.

Esta bendición se imparte desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, llamado por eso Balcón de las bendiciones. Para la ocasión el pontífice suele revestirse con ornamentos solemnes (mitra, báculo, estola y capa pluvial) y va precedido de una cruz procesional y acompañado de cardenales, diáconos y ceremonieros.

‘Urbi et Orbi’ otorga a los fieles católicos la remisión por las penas debidas por pecados ya perdonados. La culpa por el pecado es remitida por el Sacramento de la Reconciliación (confesión), de manera que la persona vuelve a estar en gracia de Dios, por lo cual se salvará si no vuelve a caer en pecado mortal.

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La bendición tradicionalmente se imparte dos veces al año: el Domingo de Pascua y el día de Navidad. También se puede dar en ocasiones especiales, como el día de la elección del Papa; es decir, al final del cónclave; y la extraordinaria del 27 de marzo de 2020, con motivo de la pandemia del coronavirus. (I)