17.000 personas volvieron al trabajo presencial en este 2022 y ahora solo quedan 13.824 laborando desde casa

Lunes, miércoles y viernes el trabajo es como siempre fue, de 09:00 a 17:30. Los otros dos días de la semana laboral siguen con el ritmo que tuvo en la pandemia: “Una locura, es como hacer cinco cosas a la vez”. Este mes —justo a los dos años del confinamiento por el COVID-19— a la oficina de Dannet Barrezueta, una ejecutiva de cuenta de 27 años, ya volvió todo el personal esos tres días.

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El Ministerio del Trabajo registra que 17.000 trabajadores volvieron a la presencialidad en este año y ahora solo quedan 13.824 laborando desde casa. Durante la pandemia hubo hasta 457.680 teletrabajadores. Las cifras muestran que tanto el sector público como el privado prefieren el trabajo presencial, y en estos dos años del sistema emergente hubo pros y contras.

¿Qué es lo bueno de trabajar en la oficina?

“Me puedo concentrar mis ocho horas trabajando. En casa, uno trabaja mucho más. Como tengo un hijo, me toca atenderlo a él, la escuela y los deberes (hasta el mes pasado, cuando terminó el año escolar); cocinar, hacer el trabajo. Es complicado”.

Cuando va a la oficina, a Dannet la ayuda su mamá. Los cinco primeros meses de la pandemia, en 2020, solo trabajó en casa; luego iban por grupos y dos días a la oficina. En febrero del 2021 se enfermó y tuvo dos días de descanso, y siguió un mes haciendo su trabajo desde casa, algo que —comenta— le genera más gastos por el mayor consumo de electricidad.

Así fueron volviendo en otras empresas, por días y por grupos. En Novacero, el teletrabajo se aplicó los dos primeros meses de la pandemia; desde el 15 de mayo del 2020, los primeros en reintegrarse fueron las áreas de producción; y, hace siete meses, desde el 1 de septiembre del 2021, las áreas administrativas. Para algunas posiciones se permitió mantener uno o dos días a la semana el teletrabajo, pues para la empresa eso se convirtió en un beneficio para sus colaboradores, como una de las maneras de cuidar a la gente de forma integral.

¿Cómo ayudó el teletrabajo a las empresas a seguir operativas y en sus costos?

“La empresa nunca dejó de mantenerse activa y conseguir los resultados, aunque con las dificultades propias de lo que vivía el país y el mundo. No fue un impedimento, para las posiciones que podían realizarse desde un esquema de teletrabajo, el cumplir con sus objetivos. Pudimos, con mucha adaptación al cambio y resiliencia, aceptar y enfrentar los nuevos retos que el teletrabajo nos presentó”, comenta Gabriela Bordes, gerente de Recursos Humanos.

Y sobre si hubo ahorro en costos de producción o si costó más aplicar el teletrabajo, indica: “Si bien tuvimos que incurrir en gastos que no teníamos previstos, como el servicio de transporte puerta a puerta para los trabajadores, proveer a los empleados de los insumos para el cuidado contra el COVID, exámenes de laboratorio de COVID, por otro lado, hubo ahorros en costos fijos administrativos, sin duda”.

Ahora la premisa es mantener los cuidados básicos: lavado de manos, uso de mascarilla en lugares muy cerrados, evitar aglomeraciones, entre otros.

Esta industria tiene plantas en Quito, Latacunga y Guayaquil, y más de 1.000 empleados reactivados en el trabajo presencial. Las empresas de los sectores privados y públicos ya retornaron al 97 % de su personal que estuvo en el teletrabajo.

El Ministerio llevó la cuenta de quienes trabajaron en casa durante los dos años de la pandemia. En julio del 2021 contabilizó 457.680 teletrabajadores, y al cerrar ese año ya solo quedaban 30.920. Desde entonces y hasta el 18 de marzo del 2022, “de acuerdo al registro realizado por los empleadores dentro del Sistema Único de Trabajo-SUT se encuentran vigentes hasta el momento 13.824 teletrabajadores a nivel nacional”, según datos de la cartera de Trabajo.

En octubre del 2021, el aforo para el trabajo presencial aumentó del 50 % al 70 %. Tres meses después, en enero pasado, las empresas regresaron a parte de su personal al teletrabajo ante una nueva ola de contagios del coronavirus. Actualmente ya no hay restricciones de aforo para ninguna actividad.

Maestros serán los próximos en volver al trabajo presencial

En un mes más terminará el teletrabajo para otro personal con el retorno a las clases presenciales en escuelas y colegios en la Costa.

Mariana, una maestra de educación básica, ya había vuelto a su aula en diciembre pasado, saltando una semana. Desde ahí solo daba clases; sus alumnos la seguían por la plataforma virtual. Ahora están de vacaciones y en abril ya retomarán la presencialidad total, y así lo prefiere, porque, como docentes, ella y sus compañeros dicen que es necesario que se la retome, porque aunque hayan salido a flote con las clases virtuales, los niños tienen vacíos que habrá que llenar con nivelación.

A ella los primeros cuatro meses de la pandemia le bajaron el sueldo; nunca le dieron ni pidió una explicación. Mientras estuvo en teletrabajo, recuerda lo incómodo que fue quedarse en su cuarto dando clases, adecuarlo como aula, mientras sus hijos seguían sus propias clases virtuales en la sala y su esposo también trabajaba desde casa. (I)