En junio de este año se registró una fuerte caída del consumo de combustibles de automotores a nivel nacional. La paralización de 18 días generó esta contracción de su consumo, lo que representó también una reducción de la actividad económica en el país.

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De acuerdo con datos de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Petróleo (Camddepe), los tres combustibles que tuvieron la más fuerte caída, comparando con lo consumido en el mes anterior, es decir en mayo, fueron el diésel 2 y el diésel prémium y la gasolina extra.

Es que el diésel 2 pasó de 39.810 barriles consumidos en mayo a 27.774 barriles consumidos en junio, es decir, una reducción del 30,2 %. La gasolina extra, en cambio, pasó de 1′140.564 barriles a 875.965 barriles, es decir, una reducción del 23,2 %. El diésel prémium, en cambio, pasó de 1′931.909 barriles a 1′525.121 barriles en el mismo periodo de análisis, lo que equivale a una caída de 21,1 %.

Oswaldo Erazo, director ejecutivo de la Camddepe, explicó que el impacto pudo haber sido peor si la paralización se extendía por todas las regiones del país, sin embargo estuvo más focalizada en el sector de la Sierra centro y sur. Esto ocurrió en varias provincias de la Sierra como, por ejemplo, Chimborazo y Bolívar, al no poder acceder ni despachar combustibles.

Así, la mayor reducción en cuanto a gasolinas se registra en la gasolina extra que se distribuye más en la Sierra, ya que la ecopaís que se distribuye especialmente en la Costa, no registra una baja tan pronunciada. Dicha reducción para la ecopaís fue de 9,5 % al pasar de 1′233.994 barriles en mayo a 1′113.840 barriles en junio.

La caída de las ventas afecta tanto a las estaciones de servicios que viven del día a día como a toda la actividad de comercio en el país, expresó Erazo.

El mercado interno de los combustibles se ha visto alterado de manera importante en el mes de junio. Este mes hubiese sido de recuperación, pues ya desde mayo se había empezado a rebasar los niveles prepandemia de 2019.

Sin embargo, como producto de la presión por las paralizaciones se bajó en dos ocasiones el precio de los combustibles (extra, ecopaís y diésel), primero en 10 centavos con el decreto 462 y 5 centavos más con el decreto 467. Previamente hubo la paralización que impidió el acceso al combustible a los consumidores.

Por ello, según Erazo, aún no ha sido posible conocer cómo ha sido el comportamiento de los consumidores del combustible y en qué porcentaje continuará la migración de preferencias de la gasolina súper a la gasolina regular de menor precio.

Lo que sí se conoce es que el próximo 12 de julio se generará un nuevo precio sugerido de la gasolina súper que está liberada y que, según se ha comportado el precio del crudo y el precio de los derivados a nivel mundial, seguramente tendrá una ligera alza.

En todo caso, según los datos de Camddepe, el consumo de la súper se halla en 19,1 % al pasar de 143.069 barriles a 115.749 barriles entre mayo y junio.

Se debe esperar un mes para la comercialización de gasolina de 89 octanos

Este 12 de julio estaba previsto que saliera a comercialización una gasolina mejorada de 89 octanos denominada extra plus 89 y eco plus 89. Sin embargo el plan se pospuso para el 12 de agosto. Se trata de una alternativa que podrían adoptar los consumidores que buscan usar un combustible de mejor calidad, pero que les cuesta pagar la gasolina súper. El precio de este combustible será liberado, pero menor al de la actual súper. La demora de un mes es justamente debido a la paralización indígena, que hizo que se perdieran varios días de preparación previa, han dicho las autoridades petroleras.

En todo caso, este piloto empezará el 12 de agosto y de esta manera el mercado podría llegar a contar con esta nueva opción, dependiendo de la respuesta del público. Para el 12 de septiembre está previsto, además, que la gasolina súper de 92 octanos sea reemplazada por una mejorada de 95 octanos. Ambas gasolinas nuevas tendrían calidad euro 5, dice el Gobierno, lo cual redunda en la mejora de la calidad del aire. Pero se ha aclarado que las gasolinas de 85 octanos (eco y extra) no desaparecerán y seguirán siendo subsidiadas.

Sobre este último punto, Erazo aseguró que se deben analizar tres factores. Que la calidad sea la que está ofreciendo el Gobierno, pues no solo por el mayor octanaje puede ser considerado un combustible euro 5, sino también hay que estar muy pendientes de las partes por millón de azufre (ppm). Erazo es poco optimista sobre la receptividad que tendrá en el público esta nueva gasolina mejorada, pues dijo que ya se ha demostrado en varias ocasiones que el consumidor ecuatoriano prefiere precio antes que calidad.

En tercer lugar, dijo, no entiende por qué el Gobierno insiste en habilitar el plan piloto con una gasolina con más etanol, cuando el subsidio de la gasolina etanolada es mayor en 39 centavos. Explicó que actualmente el subsidio por galón para la gasolina extra es de $ 0,99, mientras que para la ecopaís con etanol es de $ 1,38 por galón. (I)