Con el objetivo de fortalecer la cooperación internacional y avanzar en la gestión ambiental de la región, la ministra del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, Inés Manzano, inauguró este martes en Quito la primera edición de la Convención Internacional del Fondo para el Medioambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés).

Este evento se extenderá hasta el 5 de septiembre y reúne a 140 representantes de 17 países latinoamericanos. Su propósito es informar sobre las orientaciones de programación del GEF-8 y las recomendaciones de política del GEF.

El Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (Maate) indica que en esta primera edición en el país, se reunieron coordinadores del GEF, representantes de las convenciones, organizaciones de la sociedad civil y organismos internacionales, quienes tendrán la oportunidad para conocer y comprender el ciclo de los proyectos del GEF y explorar iniciativas transformadoras mediante métodos interactivos.

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En esta jornada, los participantes promoverán el intercambio de conocimientos y la mejora en la implementación de proyectos. Por su parte Ecuador, destacará los proyectos emblemáticos como el manejo integrado de paisajes en la región amazónica ecuatoriana y la restauración ecológica en Galápagos.

Entre los proyectos apoyados por el GEF en Ecuador están: el manejo integrado de paisajes de uso múltiple y alto valor de conservación en la Amazonía, la restauración de paisajes degradados en Los Andes y zonas costeras, la adaptación al cambio climático en recursos hídricos de Los Andes y la implementación del Sistema de Transparencia Climática del Ecuador.

En su intervención, la ministra Manzano destacó el papel crucial del GEF como uno de los principales financiadores de proyectos ambientales.

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“Entre 2022 y 2026, durante la octava reposición, Ecuador recibirá cerca de $ 39 millones por parte del GEF. Dichos recursos, contribuyen a fortalecer áreas prioritarias como la biodiversidad, cambio climático y la degradación de tierras”, detalló la funcionaria.

La convención también proporciona una plataforma para que las organizaciones de la sociedad civil se conecten con los gobiernos y compartan buenas prácticas.

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El Maate destaca que este evento, que sigue a talleres similares realizados en África y Asia, representa un avance significativo en la cooperación regional y global. (I)