El relleno sanitario de El Inga, ubicado en la parroquia de Pifo, al nororiente de Quito es el lugar donde se depositan los desechos de todo el Distrito Metropolitano de Quito (DMQ). Más de 2.000 toneladas de basura diaria se producen en la capital, y esto es depositado en áreas de terreno llamados cubetos.

Desde el 2003, la basura de Quito se ha dispuesto en este lugar, pero los espacios disponibles se han ido acabando.

Desde la anterior administración se informó que se construirá el cubeto 11 en la zona occidental de este grande terreno, por medio de terrazas se dispondría los desechos de una manera que, según informaron, no tendría incidencia con el río que pasa por esa zona.

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Además, hasta que se construya este gran cubeto, se tenía previsto la expropiación de un área de terreno perteneciente a la empresa Duragás, vecino de este relleno. Sin embargo, se dio una disputa jurídica, pues la empresa no estaba de acuerdo con esta acción.

Disputa por un terreno entre Duragas y empresa encargada del manejo de la basura de Quito

Bajo la nueva administración del alcalde Pabel Muñoz se ha sacado a la luz una serie de problemas con el manejo de los residuos sólidos de la ciudad y su disposición. Por ello han ofrecido tratar el tema con mayor interés.

Santiago Andrade, gerente de la Empresa Municipal de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Emgirs), criticó las medidas tomadas por la anterior administración.

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A su juicio, no existió una visión a largo plazo, pues comentó que se subió el proceso para la adjudicación del contrato de construcción del cubeto 11, pero no se solucionó el problema de la piscina de lixiviados (líquido que sale de la descomposición de la basura), que funciona en el lugar, la piscina 9, que tendría 3.000 m³ de lixiviado.

Para solucionar este problema, Andrade dijo que se deberá construir una nueva piscina que esté alejada del cubeto. Esta se pretende hacer en el espacio que pertenece a Duragás, el que estaba en disputa y al que según informó ya existe un acuerdo.

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“Llegamos a un acuerdo con nuestro vecino Duragás, para poder utilizar los predios de ellos a través de una figura de comodato, no va a haber expropiación, va a ser un comodato donde ellos nos ceden esos terrenos. Nosotros construimos no un cubeto, sino una piscina para sacar el lixiviado de la piscina donde se va a construir el cubeto 11, y ya sacado ese lixiviado comenzamos a construir el nuevo cubeto”, expresó.

En una publicación de este Diario, del 12 de julio se informó sobre la acumulación de lixiviados en el relleno sanitario y el contrato para el manejo de este líquido, que no se estaba tratando de manera correcta, según el Municipio.

En la nota se nombró a la empresa Duragás como oferente para adjudicarse el contrato para el manejo de lixiviados, pero, se trató de un error, pues esta empresa no tiene ese tipo de negocio. En lo que sí incide es en la entrega de sus terrenos, como pretende el Municipio.

Desde Duragás han confirmado el acuerdo con la empresa encargada del manejo de los residuos sólidos de la capital, justamente, bajo la figura de comodato.

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Según informó Emgirs, hasta mayo de 2023 existió una acumulación de 197.723 m³. Esto, sumado a la cantidad de basura que se entierra a diario han significado una preocupación para las autoridades, quienes han ofrecido trabajar en un proceso de manejo de residuos, reciclaje y la construcción de un complejo ambiental que entrará en funcionamiento una vez que sea cerrado el relleno de El Inga. (I)