Un disipador de energía hidráulica se construye en la descarga del colector El Colegio, en el sector El Condado, calle La Esperanza, en el norte de Quito, como parte del plan de acción en las zonas críticas de la cuenca del río Monjas, declarada en emergencia.

Además, se avanza en el proyecto de estabilización del cauce y de los taludes.

En esta obra —a cargo de la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps-Agua de Quito), y que se estima beneficie a unos 200.000 habitantes— se invierten $ 2′250.000 y tiene un avance del 30 % desde su inicio de construcción, el pasado 14 de julio.

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La función del disipador es reducir la energía mecánica del caudal pluvial que desemboca en el colector El Colegio, con el fin de que su flujo no provoque erosión en los taludes, según detalla el Municipio capitalino.

El disipador contempla una estructura de 55 metros de largo por 13 metros de ancho y obras de acondicionamiento del tramo de aproximación de la descarga. También se construye el proyecto de estabilización del cauce y de los taludes.

Se indica que, de esta manera, la Epmaps interviene con soluciones integrales para controlar la erosión generada por el incremento acelerado de la impermeabilización del suelo y para la descontaminación del cauce de la quebrada, ocasionada por las descargas directas de aguas residuales. (I)