Desde hace 20 años, Alejandra Valdez se realiza diálisis en Quito. Contó que padece de insuficiencia renal que aparentemente fue hereditaria. Empezó con problemas desde los 12 años, primero fue al Hospital Pediátrico Baca Ortiz donde recuerda que debía llevar todos los insumos.
Luego pasó a atenderse en el Seguro Social y, desde hace unos 12 años, al sector privado.
En la clínica en la que se atiende, aseguró, les dan todo lo necesario, ya que forma parte de un paquete integral de diálisis.
Publicidad
Sin embargo, anunciaron que solo los seguirán atendiendo hasta que los insumos se terminen, lo cual sería el 5 de agosto.
De ser el caso, ella regresará al hospital del IESS Carlos Andrade Marín, pero, si eso no sucede, ya analiza pagarse una sesión de diálisis, que tendría un costo de $ 145, para atender la emergencia.
Lo óptimo, sostuvo, son tres veces a la semana. Ella hace su tratamiento lunes, miércoles y viernes.
Publicidad
Si bien los están atendiendo, hay otros servicios que ya no les dan, pues los pacientes antes recibían como beneficios adicionales un recorrido, refrigerio y receta médica.
Mientras tanto, en un centro de diálisis de Quevedo, en la provincia de Los Ríos, se realiza el procedimiento a pocos pacientes. Este martes, de un grupo de unas 300 personas, solo se atendió a 30.
Publicidad
Pamela Luna, de esa unidad de diálisis, comentó que estaban esperando el despacho de insumos por parte de los proveedores para continuar con la atención. Sin embargo, confían en que les fíen con cheques de garantía y firmando pagarés.
La deuda del Ministerio de Salud Pública (MSP) con ellos es de seis millones de dólares; mientras que el IESS, desde hace trece meses, debe cinco millones de dólares.
Dializadoras anuncian suspensión paulatina de atención debido a falta de pago estatal
Hay deudas desde hace seis meses con el personal médico, administrativo y operativo.
Luna expresó su preocupación por la situación de los pacientes y señaló que están haciendo esfuerzos para continuar prestando el servicio. Sin embargo, de no poder seguir operando, notificarán al sistema sanitario estatal.
Publicidad
En otra dializadora que atiende en Santo Domingo de los Tsáchilas y El Carmen, solo se realizan de dos a tres sesiones debido a la falta de insumos, y están considerando paralizarse por deudas que equivalen a ocho salarios.
Ricardo Murillo, quien tiene previsto realizarse este martes su sesión de diálisis en una clínica en Guayaquil, buscó los insumos en distintos lugares del Puerto Principal y logró conseguirlos todos; no obstante, está a la espera de que ese establecimiento de salud no haya cerrado sus puertas. (I)
