Más instructores que miembros de las juntas receptoras del voto (MJRV) asistieron al primer turno de capacitación este viernes, 7 de julio, que es de 09:00 a 11:00, en la Delegación Electoral del Guayas. En cada mesa se sientan dos instructores y dos ciudadanos con todo el material electoral.
La primera pregunta que se formula es: ¿Ya han participado en mesa? En esta ocasión, tres de los cuatro asistentes ya tenían experiencia. Se enseñaron las fases del proceso: instalación, votación, escrutinio y embalaje.
La instalación se desarrollará entre las 06:30 y 07:00 del 20 de agosto, día del sufragio; la votación empieza a las 07:00 y culmina a las 17:00. Después comienza el escrutinio, que en esta ocasión duraría hasta las 19:00 o 20:00. Y finalmente, el embalaje del material.
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Los ciudadanos que participaron, tres hombres y una mujer, anotaban los detalles, pero prestaron mayor atención a la parte del escrutinio. Aquí manejarán cuatro papeletas: binomio presidencial, asambleístas nacionales, provinciales y consulta popular del Yasuní. Habrá dos biombos y dos urnas. Una de color blanco para presidenciables y otra café para las papeletas restantes.
Al momento del conteo, los capacitadores María Soledad Castro y Fausto Peñafiel explicaron y dibujaron las correctas formas de expresión de voto como un corazón, círculo, raya, visto, asterisco, siempre que sea dentro o fuera del casillero. Pero si toca el otro casillero o lo raya, no es válido. Y si el votante dibuja imágenes obscenas, así sea dentro del casillero, no cuenta ese voto.
Esta capacitación inició el 5 de julio y culmina el 20 de agosto. En total 13′450.047 electores están convocados a sufragar. De estos, 6′626.215 son hombres y 6′823.832 son mujeres, según el padrón activo publicado en la página web del CNE.
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Hay 39.892 juntas receptoras del voto a nivel nacional, cada una con siete miembros principales y suplentes. Se habilitaron 4.380 recintos electorales.
Otro de los detalles que los MJRV deben tener en cuenta es cuando llenen el acta de escrutinio. Allí anotarán los votos válidos, nulos y blancos. Esa numeración debe ser como la caligrafía que es mostrada en el documento. Por ejemplo, el 1 es una raya vertical sin la otra raya inclinada a la izquierda.
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Una de las asistentes preguntó desde cuánto se enseñó esto y los capacitadores respondieron que desde las elecciones seccionales pasadas. Sin embargo, la ciudadanía asegura que esa instrucción no la dieron. “Sería bueno que esto se recalque más por la transparencia”, apunta.
Si un miembro de la junta escribe los números de la forma incorrecta, el sistema no lo valida y esa acta pasaría a ser inconsistente, menciona Castro. “Puede ser que se interprete con otro número y ahí se convierte en una inconsistencia. Ya se dañó el acta”, indica Castro.
Las actas pasan por el Centro de Digitalización de Actas (CDA), el cual detecta cuando un acta es correcta y cuando tiene inconsistencias.
Una vez concluido el conteo, es importante que las actas sean firmadas por todos los integrantes de la mesa, pegar el sticker correspondiente y alguna observación en caso de existir, como por ejemplo que tengan más o menos papeletas.
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En ambas situaciones se escribe esa eventualidad y se toman decisiones. Si en una mesa hay una papeleta adicional, los instructores señalaron que al azar y sin ver se escoge una y se la guarda en el paquete electoral y ya no es válida. Puede ser que esa papeleta fue depositada en una urna de una mesa electoral cercana y nadie se percató.
El otro escenario es cuando falta y lo más probable es que el ciudadano/a se la llevó y tampoco nadie se dio cuenta. Aquí es esencial el rol del tercer vocal, asegura el capacitador Peñafiel: “Es el que se encarga de orientar al votante. Debe estar pendiente, si se le escapó, se le escapó, pero ese es su trabajo cívico”.
A ellos se les reconocerá, como en el anterior proceso, el pago de $ 40, que es cancelado en meses posteriores a la elección.
Fallecidos aparecerán en padrón
“Fallecido, no firmar en este casillero”. Así es como verán los MJRV el espacio en el que aparecerán los ciudadanos fallecidos, pero que aún constan en el padrón electoral. Los capacitadores aseguraron que ese espacio estará también sombreado para que no haya ninguna confusión.
En estos comicios efectivamente se usará el mismo padrón que el de las seccionales del 5 de febrero pasado y como no se ha actualizado constarán 71.698 personas fallecidas (con corte al 30 de junio del 2023), según el CNE.
Además, hay una “hoja padrón”, la cual incorporará el total de firmas y huellas digitales de las personas que efectivamente sufraguen. Esto se colocará en la pared de los recintos electorales.
En anteriores días la presidenta del CNE, Diana Atamaint, explicó que el primer paso que deben dar los miembros de las juntas receptoras del voto será el de contar las rúbricas y huellas. Luego, al contar los votos, estos deben coincidir con el total de firmas y huellas.
Llevar bolígrafo
Aunque en el paquete electoral ya viene un bolígrafo, los capacitadores recomendaron a los asistentes llevar uno, sea de color azul o negro. “Lo que sucedió en la votación anterior es que no valía y se mandó a comprar”, dice un ciudadano, quien contó esa experiencia. (I)
