El papa Francisco arremetió contra eutanasia y el suicidio asistido al señalar que no se puede pedir a los sanitarios que “maten a sus pacientes”.

“El personal sanitario, por naturaleza, tiene la vocación de cuidar y aliviar, ya que no siempre pueden curar. ¡Pero no podemos pedir a los sanitarios que maten a sus pacientes!”, indicó el líder de la Iglesia católica. “Si matamos con justificaciones, acabaremos matando más y más. Me atrevo a esperar que, en cuestiones tan esenciales, el debate pueda celebrarse en verdad para acompañar la vida hasta su fin natural”, agregó.

Francisco recibió este viernes en el Palacio Apostólico a una delegación de administradores públicos franceses, acompañados por el arzobispo de Cambrai, Vincent Dollmann. Así, ha denunciado que bajo la justificación de esto hay “una progresión geométrica”. Por ello, ha instado a tener “un debate de verdad” para acompañar la vida hasta su fin natural y no quedar atrapado en esta “cultura del descarte que está por todas partes”, detalla Europa Press.

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De este modo, el papa indicó que la eutanasia o el suicidio asistido son parte del programa de “la cultura del descarte” que “descarta” lo que no se necesita.

También señaló que el método democrático y representativo debería permitir poner en conocimiento de las más altas autoridades “las aspiraciones y necesidades reales de la población” sin que medien “la ideología o la presión mediática”.

La ideología y la presión mediática arruinan la realidad: las ideologías porque la destilan y la hacen perder su magnitud; y la presión de los medios de comunicación porque conducen a “amañarla” y hacerla dejarla autenticidad en su expresión”, destacó el religioso.

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Actualmente hay siete países donde la eutanasia es legal y no se debe recurrir a un proceso legal riguroso, como Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, España, Canadá, Colombia y Nueva Zelanda.

Colombia es el único país de Latinoamérica donde este proceso es legal, después de que el Constitucional consagrara en 1997 la muerte digna como un derecho fundamental en caso de enfermedad terminal cuando el paciente sufriera de mucho dolor, lo solicitara de forma voluntaria y lo realizara un médico. (I)