Agentes de Inteligencia argentina hicieron seguimientos a la familia de Adolfo Macías (alias Fito), líder de Los Choneros, en ese país, días antes de su captura. En sus informes dejaron registrada la cautela de sus movimientos, muchos de los cuales les parecían sospechosos. Así pudieron identificar los vehículos en los que se desplazaban y a sus acompañantes. EL UNIVERSO accedió a varios documentos de esa investigación.
Los archivos de Inteligencia afirman que el cuñado de alias Fito, Jorge P. T., fue quien adquirió la lujosa vivienda donde fueron encontrados la esposa, tres hijos y un sobrino del hoy prófugo. La propiedad, de dos pisos, está ubicada en el exclusivo club Valle del Golf, en las afueras de Córdoba. El conjunto tiene aproximadamente 50 manzanas y en su interior hay un campo de golf.
Los agentes dejaron registrada su sorpresa por cómo Jorge P. T. pudo comprar una propiedad tan costosa, pues a la vez tenía una deuda altísima por las expensas del club. Según los reportes, esa propiedad había terminado de construirse un año antes y era la única que quedaba por venderse.
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La esposa de alias ‘Fito’ ha sido investigada en dos procesos penales en estos años
Tras la transacción, agregan los informes, empezaron a llegar a la vivienda muebles, camas, colchones, televisores y demás artículos de menaje, todos nuevos. Lo sabían porque venían envueltos en fundas de fábrica. Según los archivos, todos estos bienes fueron transportados en un mismo vehículo, un Fiat Siena plateado.
Luego de amoblar la propiedad, esta quedó inhabitada, refieren los informes. Esto hace pensar a las autoridades argentinas que todas estas actividades fueron muy bien planificadas como antesala de la fuga de Fito de la cárcel Regional de Guayas, afirmó la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich. El Gobierno ecuatoriano informó de este hecho el 7 de enero pasado.
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El inmueble se mantuvo sin ocupantes hasta el viernes 5 de enero de este año, a las 08:00, cuando llegó la esposa de Fito, Mariela P. T., junto con tres de sus hijos. A su llegada, reseñan los archivos de Inteligencia, ella propuso abonar 70.000 pesos argentinos (unos $ 85) a la deuda de las expensas, en efectivo, argumentando que no poseía cuentas bancarias.
También dio un número de teléfono local para coordinar su seguridad con los guardias del conjunto, reportaron los agentes de Inteligencia. Además describieron la cautela con que ella se movía, por ejemplo, cómo evitaba ser registrada en la entrada del club.
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De acuerdo con los reportes, el club es totalmente cercado y solo hay un acceso donde los guardias filman y fotografían a todos quienes ingresan. Para entrar hay que ser socio del club o identificarse informando el motivo de la visita. Esos datos son evaluados por la seguridad para dar o negar el permiso.
Mariela P. siempre se mostró reticente a cumplir con los controles de acceso, diciendo que no tenía tarjeta de ingreso como moradora ya que era nueva en el vecindario, refieren los informes.
Cómo encontraron a la familia de alias Fito en Argentina
Los agentes también registraron las actividades de Mariela P. T. que les parecían anormales. En un reporte aseguraron que ella fotografiaba y filmaba con su celular “moviéndose de una forma muy sospechosa sobre las casas linderas y siempre hablando o mensajeándose con alguien”. Agregaron que la familia no se relacionaba con nadie, sino que apenas saludaban. “Nunca se presentaron como lo hacen comúnmente los vecinos”, informaron los investigadores.
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Pese a esta cautela, ellos identificaron dos vehículos en los que Mariela P. se transportaba: un automóvil Renault y un Chevrolet Ónix Joy. También descubrieron que los vehículos eran conducidos siempre por la misma persona, un argentino de 45 años que iba acompañado de otro coterráneo, de 51 años, quien solía ir en la parte posterior de los automotores.
Los informes también señalan que el familiar que compró la casa, Jorge P. T., había dejado Argentina el 3 de noviembre de 2023, según los registros migratorios. Sin embargo, los investigadores establecieron que varios visitantes informaban a los guardias que visitarían a esa persona para poder ingresar al club. Por eso, los agentes suponían que él seguía viviendo en el lugar, pero al momento del operativo no lo encontraron.
Según los reportes oficiales, solo fueron ubicados la esposa, tres hijos y un sobrino de Fito. (I)
