El gobierno de México pidió suspender a Ecuador de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) por el ingreso a su embajada en Quito en la denuncia que presentó ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) este jueves 11 de abril. Pero la sanción debería entrar en vigor “en tanto no se emita una disculpa pública reconociendo las violaciones a los principios y normas fundamentales del derecho internacional”, dijo la canciller mexicana, Alicia Bárcena, al confirmar la formalización de la querella ante el máximo tribunal de justicia internacional de las Naciones Unidas, con sede en La Haya.

Analistas consultados por EL UNIVERSO coinciden en que una suspensión del Ecuador por la ONU marcaría un mal precedente sobre todo a nivel internacional. Y remarcan que sería grave quedar al margen de la organización porque aparecería como un Estado con un comportamiento ajeno a la defensa del sistema internacional y del respeto al Derecho Internacional, aparte de que le afectaría en el ámbito de las inversiones.

Desde la fundación de la ONU, dos Estados han sido expulsados: en 1971, cuando Taiwán fue despojado del asiento de la República de China, que en su lugar fue entregado a la República Popular de China; y en 1992, cuando la antigua República Federal Socialista de Yugoslavia fue suspendida por fomentar la guerra en Bosnia, según el sitio web de la entidad.

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Andrea Endara, coordinadora de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Universidad Casa Grande, entiende que la solicitud planteada por México intenta crear un precedente luego de que Ecuador violara una de las leyes fundacionales del Derecho Internacional que es la Convención de Viena sobre las Relaciones Diplomáticas de 1961, a fin de evitar que en futuras ocasiones esto vuelva a ocurrir.

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Endara asimismo recuerda “a lo largo de la historia ha habido varias situaciones similares que no han llegado a esta expulsión que plantea México”. No obstante, detalla que dentro de las sanciones de la CIJ , las de tipo comercial son comunes.

Endara afirma que Ecuador no ha violado los principios de la Carta Fundacional de la ONU, misma que en su artículo 6 reza: “Todo Miembro de las Naciones Unidas que haya violado repetidamente los Principios contenidos en esta Carta podrá ser expulsado de la Organización por la Asamblea General a recomendación del Consejo de Seguridad”.

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“Esta es, digamos, la primera vez que viola en una magnitud como tan grande el Derecho Internacional y lo que firmó al ser adherente de la ONU”, reflexiona.

Las sanciones de la Corte Internacional de Justicia son fuertes y van generalmente desde bloqueos y compensaciones económicas, detalla. “Sin embargo, es difícil que los Estados en muchas ocasiones cumplan esas sanciones. La Corte tampoco puede exigir, eso ya depende de la ONU”.

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Respecto de potenciales sanciones comerciales, reconoce que sería duro para Ecuador porque “a pesar que en volumen el país no tiene muchas relaciones a nivel del producto interno bruto (PIB), son relaciones importantes”. “Uno de los objetivos de Ecuador desde el gobierno anterior era entrar a la Alianza del Pacífico”.

Para Daniel Crespo, profesor de la Universidad San Francisco y analista político, una eventual suspensión del país de la ONU afectaría en el ámbito de las inversiones, porque, ya de por sí, Ecuador tiene un problema de seguridad jurídica que aleja a la inversión extranjera.

En sus palabras, lo primero que deberá hacer el gobierno de Daniel Noboa ante la CIJ es articular una respuesta de defensa de su posición de la misma manera que lo hizo esta semana ante la Organización de los Estados Americanos (OEA).

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“Solamente a posteriori si es que la demanda resulta en nuestra contra, el Ecuador tendría que proceder (a emitir una disculpa pública). Pero lo primero es que el Ecuador tiene que defenderse en función de los pedidos que México ha colocado sobre la mesa”, afirma.

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Crespo señala que el pedido de México “es muy general” porque entre los puntos enviados a CIJ incluye “la reparación completa” y no especifica qué es “reparación completa”.

“Lo que a mí me parece más grave es la suspensión del Ecuador como miembro de las Naciones Unidas. Eso es gravísimo. El Ecuador es miembro fundador del sistema de Naciones Unidas. (Pero) eso es más difícil que prospere”, dice.

“Para una expulsión del sistema de Naciones Unidas estaríamos ante un escenario muchísimo más grave del que se ha presentado. Es muy difícil que el pedido de suspensión prospere”, aclara.

Y abunda: “Se ve muy mal porque apareceríamos como un Estado que después de haber tenido una defensa histórica del sistema internacional y del respeto al Derecho Internacional, un Estado que de una forma totalmente ajena a lo que ha sido su comportamiento habitual en el concurso de las naciones, toma una decisión claramente violatoria de la normativa internacional que afecta no solamente a su imagen. Inclusive pensemos en el ámbito de las inversiones”.

Crespo concluye que con el pedido de México también se abre el espacio para el diálogo político con el país solicitante.

Ecuador no solo es miembro de pleno derecho de la ONU sino que tiene un puesto en el Consejo de Seguridad dentro de la cuota de países latinoamericanos y caribeños, que ocupa desde junio de 2022.

La Corte Internacional notificó que ya ha recibido la querella de México. (I)