El nivel delincuencial en el sector de la Ferroviaria, en el sur de Quito, ha crecido considerablemente las últimas semanas. Sin embargo, los robos a locales comerciales, con el uso de menores de edad, encabezan la lista de problemas ligados a temas de inseguridad en la zona.

Una cámara de vigilancia detectó el momento en el que un auto rojo se parqueó sobre la calzada para comprar en un negocio de jugos naturales. Dos niños de entre 6 y 9 años se bajaron para realizar un pedido.

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La dueña del negocio escuchó atentamente el requerimiento del menor, mientras la niña más pequeña ingresó al local para sustraer un teléfono. Acto seguido, su madre se bajó del vehículo y empezó a contar las monedas para pagar, a manera de distracción.

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Una vez perpetrado el acto, se subieron al automotor y huyeron en sentido norte-sur. Los vecinos del barrio señalaron en Ecuavisa que anteriormente esos presuntos delincuentes utilizaron la misma modalidad para robar dinero de una caja registradora en otro negocio cerca del lugar.

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La Policía Nacional indicó que siguen levantando indicios para dar con los familiares de los niños, mientras que desde la Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños y Adolescentes (Dinapen) aseguran que ya han identificado tres casos en el que menores de edad son utilizados para estos delitos.

“Adiestran a nuestros niños y adolescentes con la finalidad de obtener un rédito o una remuneración económica para hurtos o robos a locales”, apuntó Shubert Iza, autoridad de la Dinapen Zona 9. (I)

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