Nuestro invitado
Una balanza impediría evaluar con precisión el año político de nuestro país debido a la particularidad de cada situación y su impacto. Cada función del Estado tuvo su propia dinámica con altos y bajos en un contexto de transición marcado por los escándalos de corrupción del exgobierno, la configuración de un sistema de partidos que dejó de ser predominante y que estuvo a favor de Alianza PAIS, asimismo por la creación de un Consejo de Participación Ciudadano transitorio como resultado de la voluntad popular, una situación económica con riesgos y retos por resolver y el planteamiento de una política exterior alejada del bloque que se adscribió al Socialismo del Siglo XXI.
En materia de combate a la corrupción y la impunidad, todas las funciones del Estado tienen deudas pendientes y de alta factura con la población. No se ha logrado recuperar ni el 1% de lo saqueado en los últimos 10 años. Muchas de las denuncias no han resuelto la crisis ética que atraviesa la política. Según el libro “Corrupción en la década encubierta” publicado por la Comisión Anticorrupción y de varios autores, se anuncian hechos escalofriantes. En el capítulo de Jorge Rodríguez, el Ecuador perdió 24.742’594.663 dólares por coimas directas por inversión, sobreprecios en inversión, comisión de exportación de petróleo, comisión de importación de derivados, comisión de deuda pública y otros rubros. Esta cifra que para muchos es difícil de leer, sigue siendo conservadora después que se conoce algo más.
A meses de concurrir a las urnas para la elección de autoridades locales y nacionales, el panorama anuncia una nueva configuración de fuerzas de poder, en el sentido de que los partidos tradicionales que recuperaron el registro, así como los nuevos nos conducen a situaciones muy parecidas a las del pasado, porque hay alianzas incomprensibles que hacen que la mezcla del agua y el aceite sí sean posibles, poco o nada se conoce acerca de los mecanismos de democracia interna para la selección de candidaturas, la búsqueda de famosos y populares para llenar las listas se ha naturalizado y, en muchos casos, no hay renovación de liderazgos ¿Así se puede hacer una política diferente?
En lo que respecta a la última consulta popular, la mayoría de la población dijo que sí a la transición política, sobre todo en la creación de un Consejo de Participación transitorio que desmonte el correísmo. Y pese a que en la mayoría de los casos el colegiado cesó en funciones a las principales autoridades de control y del sistema de administración de justicia, sin embargo varias designaciones transitorias pusieron en riesgo el proceso, como las disputas internas en la Judicatura de transición, la renuncia del fiscal subrogante y la figura del “encargo” no delimitada.
Aunque Ecuador no haya expresado pronunciamientos contundentes por la crisis humanitaria en Venezuela, sin embargo el Gobierno ha ido dando muestras de que la democracia no reconoce ninguna dictadura y que está cada vez más lejos del socialismo del siglo XXI y sus fans. (O)
* Docente investigador.