Lo que ha pasado con el Isspol (Instituto de Seguridad de la Policía Nacional) no tiene nombre ni presentación, dado que supuestamente están involucrados cierto altos oficiales en servicios activo y pasivo.
La ministra de Gobierno y los altos mandos policiales ya están haciendo una investigación muy exhaustiva, que debe ser enviada inmediatamente a la Fiscalía en el caso de encontrar dolo.
El problema se ve peor de lo que yo me imaginaba. (O)
Álvaro Luque Benítez, abogado, Guayaquil