La única opción de los ciudadanos ecuatorianos a tener un juicio justo frente al inmenso poder del Estado es el Tribunal Contencioso Administrativo, ante los abusos de la personería jurídica de las empresas del Estado con coactivas como CNEL, para cobrarme una deuda que simplemente no es mía.
Considero que en todos los países del mundo los juicios son orales y presenciales, excepto en Ecuador que los hacen vía telemática; con esto se distorsiona la “principal característica del proceso oral”, lo cual implica que las partes estén reunidas en un mismo lugar, alcanzando una verdadera inmediación, presentando sus argumentos y pruebas en audiencia, lo cual además de abreviar el proceso facilita su resolución.
Esto viola el debido proceso y toda opción a tener un juicio justo...
La audiencia preliminar del juicio debió ser presencial, pero sin ningún aviso la hicieron telemática, llegamos y estaban “juntitos” en la pantalla los jueces y abogados de CNEL, la audiencia no duró más de 45 minutos. No nos dejaron exponer los argumentos del caso, limitaron las exposiciones a seis minutos, me dijeron “que no lea” el texto de mi ayuda memoria, hablé tres minutos, mi abogado habló más o menos cuatro minutos, y lo que considero inaudito fue su negativa a la solicitud de un perito para examinar las pruebas y los estados contables de CNEL.
Publicidad
Facturas eternas de la CNEL-EP
Tras lo sucedido, le dirigí una carta al Consejo de la Judicatura, solicitando el juicio presencial y un perito, pero no hubo respuesta. ¿Cómo se puede interactuar pruebas con la contraparte, y con los jueces vía telemática? El juez ponente tiene el control y va a manejar la audiencia a su antojo. ¿Ustedes han visto a Pólit, Rivas y Peré ser juzgados vía telemática? Esto viola el debido proceso y toda opción a tener un juicio justo, pero nos queda “la cuarta instancia”, la opinión pública y la prensa. (O)
Juan Orús Guerra, Guayaquil
