La inteligencia artificial y los delitos electorales

En el contexto de los delitos electorales, la inteligencia artificial y otras tecnologías avanzadas pueden utilizarse para monitorear y analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real, identificar patrones de comportamiento sospechoso y detectar intentos de manipulación o interferencia en los procesos electorales. Esto incluye la identificación de campañas de desinformación, la detección de bots o cuentas falsas que buscan influir en la opinión pública, y el monitoreo de transacciones financieras inusuales relacionadas con la financiación de campañas.

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¿Por qué no implementa el CNE la inteligencia artificial en el contexto de los delitos electorales? ¿Quiénes se benefician de la falta de persecución de delitos electorales en las redes sociales?

La implementación de estas tecnologías en el ámbito electoral puede mejorar la transparencia y la integridad de los procesos electorales, ayudando a las autoridades del CNE a responder rápidamente a posibles amenazas y a garantizar elecciones justas y seguras. Es esencial que el Ministerio de Telecomunicaciones elabore un reglamento que establezca un marco legal claro y un sistema de supervisión adecuado para garantizar que estas herramientas tecnológicas se utilicen de manera ética.

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Es factible y recomendable que las políticas de vigilancia digital incluyan la prevención de delitos electorales, asegurando que las herramientas tecnológicas se apliquen de manera efectiva y respeten los principios democráticos.

Para evitar que los funcionarios del CNE apelen al desconocimiento, es importante destacar que las tecnologías y herramientas especializadas que se implementen en el CNE deben incluir el uso de algoritmos avanzados de análisis de texto e imágenes, utilizando técnicas de procesamiento de lenguaje natural para interpretar grandes volúmenes de datos y sistemas de reconocimiento facial para identificar individuos en imágenes y videos. Además, es crucial emplear modelos de IA y aprendizaje automático que, al aprender de patrones históricos de comportamiento delictivo, permitan predecir futuras amenazas y detectar anomalías en las redes sociales y la dark web.

Se necesita inteligencia para usar la IA

Estas tecnologías deben complementarse con herramientas para rastrear direcciones IP, analizar metadatos de comunicaciones y seguir criptomonedas, lo que es esencial para identificar actores en la dark web. Asimismo, es necesario establecer un sistema de monitoreo continuo 24/7 para la detección temprana de amenazas, con equipos dedicados a la vigilancia en diversas plataformas, tanto populares como menos conocidas. Además, se deben alcanzar acuerdos de colaboración internacional con agencias y empresas tecnológicas para compartir información y recursos, lo que es vital para rastrear actividades ilícitas que cruzan fronteras. También se deben desarrollar capacidades para realizar infiltraciones y operaciones encubiertas en la dark web y redes sociales, utilizando avatares digitales para interactuar con sospechosos y recopilar evidencia. (O)

Raúl Ernesto Santamaría Salazar, magíster en Telecomunicaciones y abogado, Guayaquil