Los que viajaron a la playas a quemar monigotes, lanzar o ver los juegos pirotécnicos, tomar alcohol, comer, hacer necesidades biológicas, etc.; ¿se llevaron en sus maletas, carros, la basura que hicieron?, ¿dejaron limpios los lugares donde festejaron, comieron, bailaron?

Las autoridades de esos cantones, pueblos, ¿mandaron a asear sus territorios, compusieron las calles quemadas por la candela que envolvió los monigotes?

¿Acaso lo que contaminaron, dañaron, lo dejaron así y no volverán a reparar los abusos a la naturaleza y las regeneraciones urbanas? (O)

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Antonia Balladares viuda de Balladares, vía a Daule