La ‘ciudad sin copia’ por su hermosura sin par fue una de las más devastadas por el trágico terremoto de 16 de abril de 2016. Antes su historia fue marcada por otro fenómeno de menor intensidad de similares secuelas, el último destruyó la antigua biblioteca, confluencia de escolares, jóvenes soñadores y adultos comprometidos con las letras, donde devoraban viejos tomos, allí germinaron nuestras inclinaciones por la agricultura en los raídos textos de los clásicos de esa disciplina e iniciaron su acervo cultural espíritus inquietos transformados luego en profesionales y hombres de bien esparcidos por el mundo, quienes han dado lumbre a su terruño.

El embajador, educador, politólogo, ensayista y periodista de fuste Dr. Universi Zambrano Romero, servidor público, sembrador de sabiduría haciendo patria, ahora radicado en Bahía sitio de su primera luz, relata con su clásica maestría la razón para que ese centro de autoaprendizaje lleve el nombre del médico Carlos R. Tobar, quien antes de su partida donó con enorme desprendimiento miles de volúmenes de su proficuo anaquel, evidenció la ingrata realidad que esos testimonios de la creación humana permanecen enmohecidos en carcomidos baúles, muchos ilegibles por los efectos de cambios drásticos de temperatura, humedad salina y la voracidad de roedores haciendo coro con los enemigos de la cultura, políticos incapaces de asignar recursos para la conservación de algo tan sencillo, pero indispensable para el desarrollo intelectual de la región.

Merecemos los presidentes, asambleístas (...) que tenemos; y, en lugar de quejarnos, deberíamos trabajar para merecer otros.

Se aspira a que la actual alcaldesa de Sucre, a poco de culminar su mandato, deje a la posteridad una obra que no siendo deslumbrante en lo electoral sí le ganaría un sitio en la memoria de la ínclita ciudad porteña, rescatando la antigua biblioteca tan necesaria para la formación básica de una juventud clamorosa de aprendizaje.

La urbe manabita poéticamente señalada como de las ‘nubes rosadas’ renacerá desde los escombros a un nuevo despertar en la inauguración de un espacio para el éxtasis cultural popular en el museo del Banco Central de la localidad, donde se expondrán las maravillosas inspiraciones de grandes pintores, escultores nacionales y extranjeros cedidas por el ilustre escritor, crítico, sociólogo, martillador de subastas pictóricas benéficas, el bahieño Juan Haddaty Saltos (1934-2013), quien dispuso a su amantísima esposa, también erudita de altos quilates, entregue por siempre el próximo 20 de septiembre parte de su valiosa colección forjada en galerías de arte como la Del Puerto, sitio de encuentro de lo más granado de la intelectualidad ecuatoriana y renombrados artistas plásticos.

Casi un centenar de pliegos integran el invalorable caudal estético donado por Juan; antes de su traslado a la ciudad de Los Caras fueron exhibidos con éxito en el Museo de Antropología y Artes Contemporáneas (MACC), donde concurrieron antiguos habitúes del recordado Café Galería 78, fundado por él, estarán pronto para la admiración popular estimulada por el Ministerio de Cultura y la Municipalidad, como homenaje a un ciudadano ejemplar cuyas cenizas se confundieron en el vivificante mar que acaricia a la población caraquense. (O)