Si aún puedo soñar //Quiero soñar en ti //Si aún puedo cantar // Quiero cantar aquí //Si es tiempo de empezar //Para poder seguir //Te doy mi corazón //Todo lo que hay en mí //Toda mi vida //Patria querida //Querida patria // Te doy mi vida.

Quienes me siguen saben que mi última columna del año siempre se inspira en una canción. Este año escogí una hermosa letra del compositor y cantautor chileno Fernando Ubiergo (canción Patria querida, 1999), con un profundo mensaje de amor por la patria.

El patriota en una definición simple de la Real Academia Española es “la persona que tiene amor a su patria y procura todo su bien”. Para José Martí, patria “es humanidad, es aquella porción de la humanidad que vemos más de cerca, y en que nos tocó nacer; es comunidad de intereses, unidad de tradiciones, unidad de fines, fusión dulcísima y consoladora de amores y esperanzas”. Agregaría que es donde está nuestra familia, nuestros recuerdos, nuestro niño, nuestro equipo, los amigos, el barrio.

Ahora que gran parte de nuestra patria está demolida, contagiada, tomada y absorbida por oscuros interés procuro con este artículo prender una mecha de patriotismo, sentimiento que es más que la fidelidad a un lugar en el mapa, es el respeto a nuestro propio origen. Hemos perdido espacio en los mares y fronteras, en la estructura de la justicia, en la salud y otros servicios básicos; pero lo más grave, hemos perdido la seguridad, hemos perdido los barrios, algunas ciudades y alguna provincia.

Producto de esto, hemos sido testigos este año de la partida de muchos ecuatorianos –entre ellos amigos y conocidos– que, aunque quisieron soñar y cantar aquí, tuvieron que partir dolorosamente de su patria, unos arriesgando su vida para salir y otros saliendo para no arriesgar su vida. Hemos vivido este año momentos desoladores, que lleva a los jóvenes a no querer vivir aquí, alejándose de sentir lo que continúa diciendo Ubiergo en su canción:

Si tengo que amar //Quiero amar aquí //Mis sueños, mi mujer //Los hijos que te di //Si tengo que llorar //Si puedo ser feliz //Quiero que sea en ti //Así hasta morir //Toda mi vida //Patria querida.

En este momento en el que nos han roto la historia, necesitamos patriotas, y los hay en esta nueva generación de políticos, entre ellos el presidente y varios de sus ministros, y otros servidores que han iniciado su labor, incluidos algunos alcaldes como los de Guayaquil y Samborondón. Siento que les interesa la gente y su calidad de vida, quieren cambiar las cosas. Apoyémoslos, es su oportunidad.

Les pido que no nos decepcionen, ármense de valor patriótico, fomenten la unión, recuperen la esperanza de nuestros jóvenes de vivir y desarrollarse aquí, y a lo mejor con su esfuerzo pronto ellos se emocionen al leer esta otra hermosa estrofa de la canción:

Si aún puedo creer //Quiero creer en ti //Si aún puedo luchar //Yo lucharé por ti //Si aún puedo sentir //Te ofrezco el corazón //El más profundo amor //Para sanar así //Nuestras heridas //Patria querida //Querida patria //Te doy mi vida.

Feliz año a mi Patria querida y a sus patriotas. Dios bendiga al Ecuador. (O)