El aumento de la violencia e inseguridad en nuestro país debido al narcotráfico, el ajuste de cuentas, crímenes, asaltos a toda hora y en cualquier lugar, además de los brutales enfrentamientos entre bandas dentro de las cárceles han sido la causa para que el Gobierno se haya visto obligado a decretar el estado de excepción que le permite movilizar a las Fuerzas Armadas en apoyo a la Policía; esta medida temporal tiene sus resultados, sin ser la solución.

Siendo el narcotráfico una terrible amenaza a la que hay que enfrentar con rigor, el presidente Lasso ha propuesto el Plan Ecuador que debe ser de largo aliento, con el apoyo regional de EE. UU. En 2007, Rafael Correa implementó el Plan Ecuador como respuesta al Plan Colombia e invirtió $ 135 millones dizque para financiar proyectos de seguridad y orden social en la frontera norte, sin ningún resultado.

Los ecuatorianos debemos vernos en el espejo de Colombia, en más de 50 años de violencia, producto de la subversión, narcotráfico y las bandas criminales, le ha costado alrededor de 6 millones de desplazados, 220.000 muertos y más de 50.000 desaparecidos.

El año 1999, el Gobierno colombiano, con apoyo de los

EE. UU. puso en práctica el Plan Colombia, que concebía al narcotráfico como la fuente estructural del conflicto nacional: “La violencia y la corrupción, alimentados por el narcotráfico, han generado desconfianza entre los inversionistas extranjeros, hecho que ha sido uno de los mayores obstáculos en nuestro camino hacia la modernización. La inversión extranjera es un elemento esencial en la generación de empleo y en el logro de una posición estable y próspera para Colombia en un mundo ahora globalizado”.

Las estrategias del Plan Colombia eran las siguientes: 1) Fortalecer una economía que estimule la inversión privada, incrementar la capacidad de recaudar impuestos por parte del Estado y contrarrestar las fuerzas del narcotráfico. 2) Reposicionar la imagen de Colombia en los mercados internacionales. 3) Buscar la paz. 4) Reestructurar las Fuerzas Armadas. 5) Hacer una reforma a la justicia. 6) Combatir el narcotráfico. 7) Ejecutar programas de desarrollo alternativo. 8) Fomentar la participación social para fortalecer el gobierno local. 9) Pensar en el desarrollo humano con el fin de garantizar salud y educación a la población más vulnerable. 10) Trabajar de la mano de la comunidad internacional para superar el problema de la droga”.

“Para combatir al narcotráfico necesitamos drones, radares de alta tecnología, requerimos también armamento adecuado, pero en lo fundamental requerimos tecnología y especialmente en el campo de la inteligencia y más coordinación con los países vecinos para hacerle frente a las mafias”. “Necesitamos cooperación internacional para la lucha contra el narcotráfico en el país”, ha señalado el presidente Lasso.

La gravedad de este problema que afronta el país requiere el esfuerzo del Gobierno, de la Asamblea, de la Justicia, de los gobiernos seccionales y de todos los ecuatorianos a través de una gran minga cívica por la paz, la seguridad, la justicia y el desarrollo en el marco de una democracia plena. (O)