La desinformación y los discursos de odio están dejando graves consecuencias, generan agresividad física e incluso muertes. Así lo determina un estudio presentado en Europa.

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En Ecuador el lenguaje belicoso, las acusaciones y el juzgamiento están presentes en las formas de comunicación que ofrece la virtualidad, que lejos de buscar coincidencias, conexiones y plantear soluciones creando comunidad, giran hacia la división, polarización y hasta odio, impulsando esa violencia de la que advierte el estudio europeo sobre la xenofobia.

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Más de la mitad de los discursos de odio en redes sociales se usan para deshumanizar o degradar de manera grave a la víctima (53,7 %); el 28,2 % presenta a los inmigrantes como amenaza; y en el 21,6 % de los casos se incita a la expulsión, anota el estudio El avance de la xenofobia en Europa, relatado por la agencia EFE.

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El artículo detalla la atribución falsa de asesinatos y otros delitos en redes sociales. Añade que la Fiscalía española ha pedido encontrar mecanismos para acabar con el anonimato en redes sociales.

En el 2020, en la parroquia Posorja de Guayaquil, un rumor llevado a redes sociales terminó en el linchamiento de unos estafadores a los que se acusó falsamente de secuestrar a unos niños.

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La desinformación y el odio en redes no tienen que ver únicamente con el anonimato, es necesario que se trabaje en la alfabetización digital, en la identificación de cuentas serias, en que se entienda que es mejor tardarse unos minutos en confirmar y verificar una información antes de propagar una falsedad que daña la credibilidad y peor aún se vuelve peligrosa. En esto el compromiso es de la ciudadanía, de actores políticos y del sector público llamado a buscar soluciones. Las redes bien utilizadas no son malas, permiten el contacto ágil y la información inmediata, pero no son canales de imposición de justicia, para ello están las leyes y las distintas funciones del Estado deben recuperar la confianza ciudadana y no dejarla expuesta a quienes utilizan a su interés los canales digitales. (O)