Entre 20 y 30 millones de dólares mensuales está perdiendo el sector del arte y la cultura de Ecuador como resultado de la crisis sanitaria, según el ministro de Cultura y Patrimonio, Juan Fernando Velasco, quien conversó con este Diario sobre las medidas que está tomando esa cartera de Estado.

¿Cuáles son los estragos de la pandemia que el ministerio ha registrado hasta ahora?

Por lo menos el 85 % de las actividades artísticas y culturales están detenidas, hemos hecho un cálculo desde el ministerio, que oscila que en marzo las pérdidas fueron de $20 millones hasta el 15 de abril. Y de abril a mayo, el cálculo es que las pérdidas ascienden a $30 millones, es decir, se están perdiendo en el sector del arte y la cultura entre 20 y 30 millones mensuales. Esto además está agravado por el hecho de que seguramente las actividades relacionadas con el arte y la cultura serán las que más tiempo tomen en regularizarse y normalizarse, todo eso nos pone en situación compleja...

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¿Cuáles son los sectores más afectados por la crisis?

De por sí los trabajadores del arte y la cultura ya viven en una situación de precariedad, de vulneración incluso de sus derechos como trabajadores. La gran mayoría de los trabajadores del arte y cultura no tienen afiliación al seguro social, no conocen lo que es una liquidación por despido intempestivo o un décimo tercero o un aguinaldo, vacaciones, son privilegios ganados por todos los otros sectores económicos. Dentro de los trabajadores del arte y la cultura todavía no está resuelto y es una de las tareas que tenemos desde nuestro ministerio, pero además de eso, sin duda aquellos que requieren público presente para realizar sus actividades y que además viven del día a día, o están los que generan su sustento en lo que les deja la taquilla diaria o semanal, pues sin duda ellos son los trabajadores del arte y la cultura más afectados por esta situación. A qué me refiero, a aquellos que tienen un pequeño escenario en donde realizan una presentación (...). La persona que vende el canguil en el cine también es parte de esta cadena de producción que se ve afectado en este momento y que también son parte de estos 150 000 ecuatorianos que constituyen el grupo de los trabajadores del arte y la cultura.

¿Qué está haciendo el ministerio para apoyarlos?

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El ministerio está generando toda esta serie de apoyos en donde está en primera instancia el bono humanitario gestionado por el presidente para aquellos trabajadores del arte y la cultura que se encuentran en una situación de vulnerabilidad más grave; las líneas de fomento son las líneas de fomento desde el Instituto de Cine y Creación Audiovisual (ICCA), es una línea de $100 000 para proyectos de cortometrajes que se llama Historias de la Cuarentena; y desde el Instituto de Fomento de las Artes, Innovación y Creatividad (IFAIC) (...), será una línea de un millón dólares para todo el resto de las artes priorizado en la intención de generar ingresos para todos los trabajadores, que están en torno a las producciones artísticas y culturales.

Pero ahí nomás está el desafío que supone la segunda fase que tiene que ver con la reactivación y la recuperación en donde ya hablábamos de los protocolos, pero que en donde tendremos que replantear los servicios artísticos y culturales como los conocemos. Cómo va ser visitar un museo, cómo va ser ir a una librería, cómo estar en la biblioteca, cómo ir a un sitio arqueológico, cómo se va a ir al teatro, cómo podremos volver a los conciertos, etc., y para eso tendremos que reinventarnos sobre todo en la manera en la cual circula los servicios y los bienes culturales, y para eso el ministerio pondrá a disposición a través de su fondo de fomento los recursos para idear, para pensar de manera participativa y construir esta nueva realidad.

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¿El apoyo está incluido en el Plan Integral de Contingencia para las Artes y la Cultura presentado el 27 de abril, entre ellos, la entrega del bono humanitario de $60 mensuales para 5500 trabajadores? ¿Cuál ha sido el resultado?

El bono todavía no está disponible porque tiene una complejidad alta el tema de emitir un bono. Esto solamente lo puede hacer el presidente a través de un decreto y además tiene que jurídicamente estar sustentado, pero además desde la lógica de la determinación de para quién es este bono, hay que determinar claramente la situación de vulnerabilidad de quien recibe el bono, esto es dinero público, es dinero de todos los ecuatorianos.

¿Cómo se analizará a quién se dará el bono humanitario?

Esa es la tarea del ministerio, a partir de una serie de listados que hemos recibido por parte de las organizaciones gremiales, de los colectivos, de las asociaciones de artistas y trabajadores de la cultura, el ministerio de Cultura a partir de un decreto tiene que evaluar de acuerdo a sus criterios el estado de vulnerabilidad y determinar que efectivamente esos ecuatorianos pertenecen a este grupo vulnerable, esta es una tarea compleja, delicada, que además requiere que sea hecha lo más rápido posible, puesto que sino no cumple ese objetivo fundamental, que es generar un ingreso en esta situación de emergencia.

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¿Cuántos colectivos se han contactado con ustedes?

Ha habido muchísima gente que se conecta de diversas maneras y que busca una ayuda, el Ministerio de Cultura y Patrimonio ha coordinado con el Ministerio de Inclusión Económica y Social la entrega de kits alimenticios, hemos entregado una gran cantidad de canastas a colectivos, por lo menos habremos entregado más de 1000 kits alimenticios.

¿Cuánto tiempo les tomará hacer la lista de los beneficiarios del bono humanitario?

No nos debería tomar más allá de este mes para empezar a entregar este bono que será de $60 para los 5500 trabajadores del arte y la cultura, que determinaremos que están en esta situación de vulnerabilidad, son $60 durante tres meses, es decir, $180.

¿Cuál es el futuro del Festival Internacional de Artes Vivas de Loja y otras actividades?

No tenemos claridad todavía al respecto porque no se trata solamente de una decisión del ministerio la realización o cómo va a ser realizado. Hay que recordar que el festival está institucionalizado, por lo tanto debe realizarse por ley, salvo alguna consideración que se pueda plantear, pero el mundo no tiene claro todavía cómo vamos a volver a la normalidad, estamos en comunicación permanente con otras carteras similares de otros países, pero no hay claridad, fíjate que ni siquiera hay claridad con respecto a sí hay que hacer un confinamiento social estricto o más abierto (...) Estaremos un poco evaluando permanentemente, regidos a parte por las decisiones del COE nacional que finalmente es la estancia que determinará cuál va ser el nivel de distanciamiento social y de qué manera vamos a ir saliendo de este distanciamiento social...

Seguramente vamos a tener que buscar alternativas y no descartamos el hecho de que sea un festival que tenga presencia virtual importante sino que este sea total. Lo que sí hemos decidido es que de la manera que se lleve a cabo el festival y de acuerdo al presupuesto que se tenga, porque ese es otro tema que hay que determinar cuál va ser el presupuesto que tengamos. En este momento pensar en el presupuesto que habíamos planteado a inicios de año de $1 600 000 dólares, pues todo sabemos la situación que estamos viviendo y tenemos que adaptar todo a la situación, pero cualquier presupuesto que finalmente tengamos para la realización de este festival será destinado en su totalidad para artistas ecuatorianos.

¿En el ministerio de Cultura se ha reducido su presupuesto?

Todavía no hay una revisión con respecto al presupuesto de las diferentes carteras de Estado, desde el ministerio de Finanzas, hay disposiciones con respecto a cómo se construirán, pero todavía no hay claridad con respecto a cuál va a ser finalmente ese presupuesto.

¿Han reducido personal en el ministerio?

Sí, hemos venido recortando personal. En esta última etapa todavía estamos en un proceso de desvinculación, en donde estamos haciendo un análisis caso por caso, con respecto a la pertinencia de las labores que cada funcionario realiza. Ese es nuestro objetivo, no excedernos en la cantidad de funcionarios, pero tampoco poner en riesgo los servicios que brinda el Ministerio...

Vía decreto 1039, el 8 de mayo, el presidente Lenín Moreno fusionó el IFAIC y el ICCA en una sola entidad, a la que se ha denominado Instituto de Fomento a la Creatividad y la Innovación ¿qué conlleva esta fusión, de cuánto es el ahorro, qué pasará con el personal de esos institutos?

Hay un fondo de fomento, al fondo de fomento acceden los tres institutos que tenemos en este momento, el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), el ICCA y el IFAIC. ¿Qué es lo que sucede el INPC? Tiene una lógica diferente, es más de investigación, nunca ha tenido líneas de fomento, recién vamos a lanzar este año las líneas de fomento en temas patrimoniales y tiene una lógica distinta

Sin embargo, el ICCA y el IFAIC tienen la misma lógica, pero en ámbitos distintos de la creatividad, de las artes, el ICCA ha funcionado bastante bien. El IFAIC no ha podido funcionar nunca bien desde que fue fundado hace tres años con la Ley Orgánica de la Cultura. Entonces lo que pensábamos es que hay una necesidad, hoy más que nunca las artes de manera interdisciplinaria (...) Es así que mediante decreto presidencial los dos institutos se juntan.

¿Qué es lo que va sucede con el ICCA? Prácticamente no va a tener ninguna alteración, ni en su funcionamiento ni en su estructura administrativa, quien sí va a sufrir una alteración es el IFAIC, que como decía ha probado no haber tenido las herramientas y las capacidades para resolver el fomento, se juntan estos institutos en un solo instituto, que será el Instituto de Fomento a la Creatividad y la Innovación en donde habrá direcciones. Habrá una dirección para el cine audiovisual, una dirección para las artes musicales, una dirección para las artes escénicas, etc.

¿Qué nos permite esto? Aparte de funcionar mejor, ser más eficientes, también nos permite no duplicar funciones, nos permite reducir el tamaño del Estado y generarle un ahorro de alrededor de $600 000 dólares al año, es lo que nos vamos a ahorrar con esta fusión. (I)

El arte no puede ser gratuito, hay muchas cosas que los artistas hacen de manera gratuita, como 'Desde mi caleta', como todas las contribuciones que han hecho con respecto a las canciones o la necesidad de juntarse para recaudar fondos, para levantar el ánimo, etc., pero son trabajadores como cualquier otro, viven de su trabajo, como es en este caso hacer arte, eso es importante que la ciudadanía lo entienda. Juan Fernando Velasco, ministro de Cultura y Patrimonio.