Hay dos sistemas para formar abreviaturas. Estos son por truncamiento y por contracción.
El procedimiento de truncamiento elimina las letras finales de la palabra, pero la grafía abreviada debe terminar en consonante, no en vocal: asociación, economista y prólogo se abrevian como Asoc., Econ., pról. (no aso., Eco., prolo.). Se exceptúan los casos de truncamiento extremo: a. por antes, que se usa en la abreviatura compleja a. C. (antes de Cristo).
El sistema de contracción suprime los grafemas centrales de la palabra y deja las sílabas o letras más representativas del inicio y del final: cta. (cuenta). Este método permite incluir también letras interiores: blvr. (bulevar).
Algunas palabras se pueden abreviar con los dos sistemas; por ejemplo, de magíster resultan Mag. (por truncamiento), Mgtr. y Mtr. (por contracción); de abogado surgen Ab. (por truncamiento), Abgdo. o Abgda. (por contracción).
Las abreviaturas se cierran con un punto, excepto si se reemplaza el punto por una barra: c/c por cuenta corriente. No se usa el punto cuando se escriben entre paréntesis y, por lo general, constan de una sola letra: (a) por alias, (i) por izquierda. Si la palabra desarrollada tiene tilde (página), esta se conserva en la abreviatura (pág.).
Se usan con mayúscula inicial cuando proceden de nombres propios (Bs. As. por Buenos Aires) o de expresiones denominativas, como el caso de la consulta (Asoc.). Hay algunas excepciones, como las abreviaturas que se refieren a cargos, profesiones y fórmulas de tratamiento, que deben escribirse con mayúscula inicial: Srta. (señorita), Ud.(usted), Dr. (doctor), Dir. (director). (F)
FUENTES:
Ortografía de la lengua española y El buen uso del español (versiones en línea), de la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española.
